El entrometido coronavirus se ha colado en nuestras vidas, pero también en nuestras camas. Y es que la distancia social y las mascarillas que se aconsejan para mantener a raya la pandemia están reñidas con las relaciones íntimas de la pareja.
Si bien los expertos coinciden en que la abstinencia reduciría contagios es una opción que descartan porque aumentarían los cuadros de depresión y ansiedad. Entonces surgen las preguntas: ¿Los besos están permitidos? ¿El sexo oral contagia? ¿Como afectan las "restricciones" sexuales a jóvenes y adolescentes?. José Luis Díez, experto en Sexología, contesta a estas y otras preguntas.
El sexólogo zamorano recomienda principalmente ser precavidos con "los besos boca a boca porque la saliva es el vehículo principal de transmisión del virus". Díez hace diferenciaciones: "Las parejas estables que vivan bajo el mismo techo pueden mantener las relaciones que mantenían con anterioridad".
"La precaución han de mantenerla fuera de su núcleo de relación habitual", recalca. Así, las personas con pareja que no convivan juntas deben evitar los besos y las posturas sexuales cara a cara", y si se realizan, "deberían utilizar mascarilla", aconseja el sexólogo.
¿Y se puede entonces practicar sexo oral?. José Luis Díez explica que "aunque no haya evidencias de contagio por sexo oral, o anal, conviene utilizar métodos de barrera para minimizar el riesgo en dichas conductas". Los preservativos nunca están de más.
Para las personas que no tengan pareja o prefieran las relaciones esporádicas, el sexólogo zamorano recomienda la masturbación, el sexting o las vídeo llamadas, que evidentemente no suponen riesgo de contagio. Pero avisa de que "en el caso del sexting o de las vídeo llamadas conviene ser cuidadoso en cuanto a la privacidad y la seguridad de las conexiones y envíos".
"Como el riesgo cero no existe", José Luis Díez indica que en caso de contagio "debemos informar a las personas con las que hayamos mantenido un contacto estrecho, máxime si hemos mantenido relaciones sexuales con ellas". Y añade: "Quizá no esté en riesgo nuestra salud o la de una pareja esporádica pero sí lo pueden estar familiares cercanos o terceras personas.
Este experto en Sexología considera que los adolescentes son el grupo de edad más afectado por los cambios que ha traído el coronavirus. "La percepción de invulnerabilidad, la falta de espacios de privacidad, el escarceo de las primeras relaciones, la limitación que impone el uso de la mascarilla al lenguaje no verbal" son algunas de las barreras que se encuentran los más jóvenes y que les dificultan aún más la intimidad.
"No resulta sencillo iniciar o establecer relaciones en tiempo de coronavirus pero como en otras cosas, está afectación será temporal, y seguro que los adolescentes habilitarán de nuevo claras vías de encuentro", apunta José Luis Díez.
De las cientos de preguntas que cada día contesta Fernando Simón, epidemiólogo y director desde 2012 del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, durante sus comparecencias en televisión, ninguna ha versado sobre el sexo.
¿Pero no debería haber un protocolo sanitario que diera, al menos, unas pautas?. Díez estima que se deberían haber dado unas recomendaciones, pero cree que "la magnitud de la pandemia ha dejado en un segundo plano muchos detalles importantes de la vida cotidiana de las personas".
Además, disculpa el "olvido" al entender que "es compresible que, en un primer momento, el desconocimiento preciso del mecanismo de acción y contagio del virus generara dudas e incluso confusión a la hora de tomar decisiones y recomendaciones generales, no sólo en sexualidad sino también en otros asuntos vitales".
En el resto de países tampoco han estado "atentos". El sexólogo zamorano afirma que fuera de nuestras fronteras existen "mayormente recomendaciones por agencias sanitarias gubernamentales o regionales".
Por ejemplo, en mayo, "el Gobierno de los Países Bajos recomendó a las personas solteras la búsqueda de amantes estables para pasar el confinamiento", aunque quizá "el consejo más llamativo y polémico fue el del premier británico, Boris Johnson, que prohibía el uso compartido del espacio privado por dos personas no convivientes".
A pesar de que el coronavirus se ha interpuesto con sus normas en las relaciones sexuales de todo el planeta, José Luis Díez está convencido de que la pandemia no ha reducido el deseo sexual de los españoles. "El deseo siempre está presente, otra cosa es que la oportunidad de satisfacerlo esté cercenado por el miedo al contagio", subraya este experto.
La COVID-19 tampoco parece haber cambiado nuestras conductas sexuales. Al menos, por el momento. "Eso sí, probablemente las haya ralentizado, y es seguro que ha puesto en valor aquello que se "prohíbe": los besos", evidencia José Luis Díez.
