La periodontitis, una enfermedad bucal común pero subestimada, afecta al 50% de la población mundial, según datos recientes. A pesar de las constantes recomendaciones de los odontólogos, solo el 31% de los pacientes practican una higiene interdental adecuada.
La mayoría de la población no dedica suficiente tiempo ni atención al cepillado, lo que resulta en una capacidad media de eliminación del biofilm o placa de apenas el 40%. Este dato es alarmante, ya que la salud bucal está estrechamente relacionada con la salud general.
Una boca sana no solo contribuye a la autoestima, sino que también afecta directamente a la digestión y absorción de nutrientes. La pérdida de piezas dentales o molestias bucales pueden afectar la eficacia de la masticación, lo que repercute en todo el proceso digestivo.