Llega la Semana Santa y con ella, los imprescindibles para sobrevivir a ella.
Falta poco para la semana de vacaciones, de pasión, de dolor... Bien los saben los que se escapan a la playa, los que salen de fiesta, los cargadores de pasos, los congregantes y los turistas. Son días especiales, en los que necesitamos hacer cierta provisión de productos. ¿Quieres saber cuáles?
En este post podrás conocer de primera mano cuales pueden ser los cuidados para que la Semana Santa de este año tenga un muy buen recuerdo gracias a la prevención.
SEMANA SANTA DE PASIÓN
Para muchos semanasanteros esta semana es de pasión, de recogimiento, de promesas, de esperanza, de emoción y de sufrimiento.
Los cofrades, los cargadores, los hermanos de paso, los músicos, el público, la familia, los turistas... todos pasan horas de pie, caminan por calles empedradas, mojadas, bajo el frío o bajo un inmenso calor de primavera.
Se disfruta pero también se sufre: que te lo digan a ti si eres cargador de un paso que baila al son de una marcha y se arrodilla al paso de una virgen; también sabe de sufrir el hermano de fila que camina descalzo pisando restos de pipas o un suelo frío y mojado; o como los cofrades bajo su capa gruesa de paño o de terciopelo que pasan más de 6 horas andando y aguantando de pie por calles repletas de gente.
Por tanto, seguro que alguno de estos productos de farmacia te ayudarán a disfrutar más de tu Semana Santa:
Faja lumbar (órtesis de tronco): su función es controlar, tratar, aliviar o compensar una lesión. Es decir; se pueden usar como apoyo y prevención de una lesión, o como tratamiento de alguna que ya exista.
Las fajas vienen reforzadas con pletinas de plástico evitando que se arrugue además de proporcionar un soporte consistente.
También pueden tener apoyos posteriores extras como placa sacra, lumbosacra y toracolumbosacra que reducirán la presión en estas zonas.
Es importante saber elegir cuál es la que necesitas, pues hay diferentes modelos según la zona a tratar y el trabajo que tiene que desarrollar. También según las medidas físicas serán mejores unas u otras. Para ello, busca consejo en tu farmacéutico-ortopeda u ortopeda.
Crema analgésica: después de cargar un paso durante unas horas, todo el cuerpo lo tendrás dolorido y sobre todo hombros, rodillas, espalda... para aliviar ese dolor ten a mano una crema con propiedades analgésicas, antiinflamatorias y relajantes. En la farmacia existe mucha variedad, desde las que tienen composición natural hasta las formuladas con fármacos.
También todos los que pasan horas de pie o andando, pueden acabar con dolor de piernas, gemelos cargados y pies doloridos. Para estos casos, existen cremas que favorecen el retorno venoso, evitan inflamación de piernas y las descongestionan. Suelen ser formulaciones en forma de geles, frescos y de fácil absorción.
Y no nos olvidemos de los pies descalzos en una procesión, para cumplir una promesa o para hacer una petición; para esos pies doloridos, ampollados, cortados... habrá que tener crema analgésica, polvos relajantes, material de cura y crema hidratante de pies.