El maltrato de las personas mayores es un problema social mundial que afecta la salud y los Derechos Humanos de millones de personas mayores. Este maltrato merece la atención de la comunidad internacional. Según estadísticas de la ONU, para 2050, más del 20% de la población mundial tendrá 60 años o más, y la mayoría serán mujeres quienes a menudo se enfrentan a múltiples formas de discriminación derivadas de sus roles sociales basados en el género.
Por esto, la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución 66/127, designa el 15 de junio como Día Mundial de Toma de Conciencia de Abuso y Maltrato en la Vejez.
El maltrato de las personas de edad puede llevar a graves lesiones físicas y tener consecuencias psicológicas a largo plazo. Los malos tratos a las personas de edad se prevé que aumentarán dado que en muchos países el envejecimiento de la población es rápido.
El maltrato de las personas mayores es un problema social mundial que afecta la salud y los derechos humanos de millones de personas mayores en todo el mundo y es un problema que merece la atención de la comunidad internacional.
El respeto a nuestros mayores es en sociedades como la nipona una verdadera forma de venerar la experiencia y toman la festividad, denominada Día del Respeto a los adultos mayores (敬老の日, Keirō no hi), como fiesta nacional. Esta fiesta pretende honrar a los ancianos japoneses, así como sensibilizar a la población sobre la importancia de la experiencia de estas personas, que han servido a la sociedad durante muchos años. Desde el año de 1966, esta festividad se venía celebrando el 15 de septiembre pero, desde el año 2003, pasó a celebrarse el tercer lunes de septiembre, por lo que en Japón se considera oficialmente como fin de semana largo. El Día del Respeto a los ancianos es uno de los dos días de fiesta nacional de septiembre en el país nipón.
En nuestra sociedad los mayores pasan de ser una carga a ser la salvación en miles de hogares, ya que se encargan de cuidar a los más pequeños, de hacer labores en la casa y muchas veces hasta de mantener a las generaciones que hoy en día están en paro. No es difícil encontrar en nuestros días ancianos que mantienen a sus hijos y nietos, y tampoco es dificil ver como en diferentes escándalos en residencias se ha vejado y maltratado a nuestros mayores sin ningún escrúpulo ni sentido.
El trato preferente a quienes nos enseñaron lo que sabemos y a quienes fueron nuestros progenitores debe ser una máxima en la sociedad, no hay lugar ni momento ni que hacer para olvidar que ellos nos dieron la vida y la experiencia, y sus padres a ellos, y así sucesivamente durante generaciones.