La Tercera División esperaba para Villaralbo o Zamora B en el Municipal Los Barreros de la localidad zamorana. El duelo que decidiría qué equipo conseguía el ascenso arrancaba con superioridad rojiblanca, motivados por los dos goles que debían anotar para adjudicarse la remontada.
A pesar de mayor control del juego, las ocasiones no llegaban para los de Marchena, que se topaban con un Villaralbo bien posicionado y que aguantaba con las líneas juntas.
Los rojiblancos, viendo que superar la medular azulona se complicaba, buscaban en largo a Luis Rivas, quien volvía a tener una marca individual que a penas le permitía explotar su velocidad, aunque a punto estaba de convertir una gran jugada individual dentro del área que acababa cortando el defensor.
El partido se detenía con la lesión de Chechi, mientras era atendido, los jugadores aprovechaban para hidratarse ante el sol y la tarde calurosa de este sábado.
A pesar del dominio del Zamora B el Villaralbo parecía tener bajo control la situación del juego, aproximándose a portería rival en los últimos compases de la primera mitad, sobre todo explotando su banda derecha.
Con el empate a cero y con mucha pesadez en ambos conjuntos, el colegiado señalaba el final del primer acto, estando en esos momentos el Villaralbo en Tercera División.
Transcurrían escasos minutos tras la reanudación del choque para que el Zamora B asestase el primer golpe con un tanto de Luis Rivas, quien dentro del área cruzaba el balón de derecha a izquierda para adelantarse y empatar en el global.
Reaccionaba bien el conjunto azulón al mazazo con una jugada individual pero el lanzamiento acababa desviado por el defensor rojiblanco. Venido arriba el Zamora B, buscaba el segundo y cinco minutos después Jesús Villar se internaba en zona de castigo y el disparo al primer palo se colaba al fondo de la portería para hacer el 0-2.
Poco duraba la alegría en el lado rojiblanco y es que el Villaralbo convertía un saque de esquina con un magnífico testarazo de Gavi para hacer el 1-2 y devolver la ventaja en la final a los azulones.
El partido entraba en una fase de menor ritmo, con ambos equipos intentando no cometer errores que pudieran decantar la final. Superada la hora de encuentro no había un dominador claro, ya que el Villaralbo conseguía hacerse con mayor posesión.
Ambos conjuntos se dirigían a banquillos para realizar pausa de hidratación antes de encarar el último tramo de un partido que iba camino de la prórroga, sin poder evitarlo Sergio Barbero, que buscaba la escuadra a balón parado desde la frontal.
Ningún equipo rompía el empate global y el partido se iba al tiempo extra.
El Zamora seguía intentándolo y pedía un penalti que pudo pitar el colegiado tras un derribo en el área grande. El conjunto local también lo intentaba pero los centros, sobre todo desde banda derecha, no encontraban rematador. Miguel del Río tenía que intervenir sacando los puños y repeliendo un disparo potente por parte de los rojiblancos, que buscaban con mayor insistencia el tanto.
Ya en la segunda mitad de la prórroga ningún equipo quería cometer errores que resultasen fatídicos para sus intereses y el Villaralbo mantenía la posesión pero sin arriesgar en exceso.
Ya en el tramo final, Viti tenía la oportunidad de conseguir el segundo tanto tras un centro lateral, pero no llegaba por escasos centímetros. Sería en la siguiente jugada cuando el mismo Viti definía con la puntera aprovechaba un pase filtrado en el interior del área para hacer el segundo para el Villaralbo y certificar el ascenso a Tercera RFEF.
Con los nervios a flor de piel y viendo cómo se les iba la final, el Zamora B se quedaba con un menos cuando el colegiado enseñó la segunda amarilla a Samu por protestar un penalti que pedían por una posible mano.
El conjunto azulón conseguía defender el resultado hasta el pitido final, momento en el que se desató la locura en Los Barreros, que vivieron, por fin, el ascenso a Tercera RFEF.
