El Real Valladolid abre un nuevo capítulo en su historia con la salida de Ronaldo Nazario del organigrama directivo. El exfutbolista brasileño, que en 2018 adquirió el 51% de las acciones y asumió la presidencia del club, ha cerrado un acuerdo para vender su participación mayoritaria a un grupo de inversión norteamericano respaldado por capital europeo, según ha informado este viernes la entidad blanquivioleta a través de un comunicado oficial.
Aunque por el momento se desconoce la identidad del nuevo propietario, la operación está pendiente de recibir el visto bueno del Consejo Superior de Deportes, como exige la normativa vigente en este tipo de traspasos accionariales. En los próximos días, el club promete ofrecer más información sobre el proyecto que encabezará esta nueva etapa.
La marcha de Ronaldo pone fin a una etapa que ha estado lejos de la estabilidad. Durante su mandato, el Valladolid ha vivido dos ascensos a Primera División, pero también tres descensos, el último de ellos ya confirmado en una temporada para olvidar. El equipo, matemáticamente descendido desde hace semanas, se despedirá este sábado de la máxima categoría en Butarque frente al Leganés.
El ciclo del astro brasileño al frente del club ha estado marcado no solo por los resultados irregulares, sino también por una creciente tensión con la afición. En los últimos tiempos, el clamor por su salida se había intensificado, reflejando un profundo desencanto con su gestión. La crispación social y el descontento generalizado han acompañado a la entidad durante gran parte de su mandato.
Aunque no se han hecho públicos los detalles económicos del traspaso, algunas estimaciones sitúan la operación en torno a los 30 millones de euros. Con esta venta, Ronaldo se desvincula del club vallisoletano después de seis años de luces y sombras. Ahora, el Real Valladolid se asoma a un futuro incierto, pero también a la posibilidad de iniciar una reconstrucción bajo una nueva propiedad.
