Los pistacho consiguieron un triunfo agónico sobre la bocina, de nuevo con una parada de un Leo Maciel que se agiganta en las últimas jugadas y que paró con el cuerpo un balón que, de no haber perdido la renta que tuvieron los zamoranos no hubiera tenido vital importancia.
El MMT Seguros volvió a ganar y lo hizo sufriendo, algo que empieza a ser habitual en los pupilos de García Valiente, que en esta segunda vuelta están empeñados en vencer en el último segundo. En esta ocasión, y después de un partido en el que fueron mandando durante gran parte, los zamoranos vieron como a cinco minutos del final se la jugaban con máxima igualdad.
Octavio y Reyes habían sido los dos grandes capitanos pistacho en el partido, mandando a las redes sus lanzamientos y marcando siete tantos cada uno, y en el momento caliente, cuando se llegaba con empate a 23, Octavio de nuevo fue el encargado de poner el tanto definitivo. Quedaban sin embargo varios ataques por conjunto que ninguna de las dos escuadras pudieron aprovechar hasta que se entró en el último minuto.
Tuvo entonces la oportunidad el equipo zamorano, que rozaba tomar por primera vez el Pabellón de los Sueños y tenía un tiempo muerto para preparar una jugada que no salió y que permitía a los madrileños acabar puntuando. Tiempo muerto visitante y una jugada final que acabó, primero con exclusión de Marc Abalos y después con la parada de Maciel que le daba dos puntos a los pistacho.
Entonces alegría desaforada, dos puntos, una victoria muy sufrida y un paso adelante para la lucha por un objetivo del que no se despega un MMT Seguros que sigue imparable en este 2016.
