La iluminación navideña instalada en el céntrico parque de La Marina con motivo del 25 aniversario de la Fundación Caja Rural se despide a lo grande.
A primera hora de la noche de este lunes, los operarios procedían a la desinstalación de la iluminación que se extendía por toda la zona de la fuente desde la pérgola a los árboles que rodean la explanada, y que mantenía como estructura principal una gran bola de Navidad interactiva de doce metros de alto por diez de ancho con pasillo interior que ofreció espectáculos de iluminación con un apoyo multitudinario.
La ciudad se despide de la Navidad hasta el año que viene con el interrogante de si este espectáculo regresará en 2023 a la plaza de la Marina, tras comprobar el éxito que ante la demanda de buena parte de los zamoranos que han comprobado como la zona se ha revitalizado.
Durante los días venideros la rutina volverá a ser la máxima en las calles de la ciudad metida de lleno también en el invierno. Decenas de negocios cierran por vacaciones en estos días para afrontar la llegada de la primavera con un halo de aire fresco y un renovado espíritu que llevará a la próxima Semana Santa que será cuando Zamora vuelva a renacer y a encontrar una nueva llegada de cientos de miles de personas con ganas de disfrutar de las tradicionales procesiones.
Hasta entonces y con el Carnaval de por medio Zamora se envuelve en el manto de la niebla y los días grises para después del letargo sacar pecho con la primavera y la Semana Santa que no llegará este 2023 hasta primeros de abril.
