La XXXII Feria del Libro finaliza con un gran éxito de público y con un reto para el año próximo, el superar la afluencia que ha sido masiva en la Plaza Mayor. La importancia de la difusión de la lectura y darle un lugar relevante a esta edición de la Feria del Libro fue lo que llevó a la organización y al ayuntamiento de Zamora a situar en el centro neurálgico del paseo de los zamoranos la feria de este año. La valoración de la Feria para la Concejala de Cultura ha sido muy positiva en general, y el cambio de ubicación a la Plaza Mayor ha sido un acierto.
En las ventas de los libreros estará el éxito definitivo de una feria que ha concentrado en la Plaza Mayor de Zamora muchas de las actividades de esta XXXII edición de la Feria del Libro en Zamora. Una feria, que salvo el primer día con la tormenta que hizo suspender el concierto de Suricato Morse ha llevado a una afluencia masiva a las diez casetas que ofrecían lo mejor de la literatura a visitantes y zamoranos.
Las diferentes actividades que han rodeado a esta feria, han atraido a diferentes y relevantes personajes del entorno literario zamorano, y las presentaciones de libros que han superado la veintena han contado también con numeroso público.
En definitiva una edición muy positiva que según comentaba la Concejala de Cultura Maria Eugenia Cabezas a este diario había sido un acierto en cuanto a la situación puesto que muchos zamoranos se encontraban directamente en su paseo con la feria que otros años situada en la Plaza de Viriato no era tan visitble como lo ha sido en la Plaza Mayor.
"De los fallos hemos tomado buena nota, que los ha habido, y esperamos que el año próximo seamos capaces de superar esta feria de la que creo que ha sido un acierto sobre todo el cambio de ubicación".