Las festividades, que han llenado de vida una vez más a uno de los barrios más poblados de Zamora, culminaron con la emotiva procesión del Santo, cargado a hombros por los cofrades de la hermandad de San Lorenzo.
La jornada comenzó a las 20:00 horas con la tradicional Eucaristía en honor a San Lorenzo, en la iglesia del barrio. A poco más de las nueve de la noche, la imagen del santo salió a las calles, donde fue recibida con gran fervor por los vecinos. La procesión discurrió sin incidentes por las vías principales del barrio, adaptándose al recorrido habitual a pesar de las obras de humanización que afectan a varias calles.
La procesión, amenizada por la Banda Nacor Blanco dirigida por Álvaro Lozano, comenzó en la Avenida de los Reyes Católicos, donde la banda interpretó el himno español al inicio y al final del recorrido, siguiendo la costumbre de honrar al santo de esta manera. Debido a las obras, el trayecto se acortó por Núñez de Balboa, desde donde la imagen continuó por la calle Argentina hasta Hernán Cortés, para regresar a la iglesia por la Avenida de los Reyes Católicos.
La calurosa tarde, típica de esta época del año, se vio brevemente interrumpida por una tormenta que, lejos de aliviar el ambiente, lo hizo más bochornoso, dificultando la visibilidad de las famosas "lágrimas de San Lorenzo" que suelen acompañar esta festividad.
Con esta procesión, el barrio de Los Bloques despide un año más sus fiestas en honor a San Lorenzo, en una celebración que, a pesar de los cambios y las dificultades, mantiene viva la devoción y la unión de sus vecinos. Aunque aún queda por disfrutar de la comida vecinal del domingo y los bailes regionales, hoy, el barrio se despide de su Santo, con la esperanza de volver a encontrarse en las calles el próximo año, renovando una tradición que sigue siendo el corazón de uno de los barrios más emblemáticos de Zamora.