La consejera de Sanidad, Verónica Casado, anunció en su comparecencia de los jueves que Sanidad está vacunando a los profesionales sanitarios del sector privado que están en primera línea, mientras que el resto de sanitarios, del sector público y privado, que no están en primera línea serán los siguientes a los que llegará la vacuna AstraZeneca.
Sin embargo, la titular de Sanidad de Castilla y León precisó que el plan de vacunación no reparte las dosis al ritmo deseado porque "necesitamos 800.000 vacunas, no las 200.000 que tenemos". Eso sí dejó claro que "todas las vacunas son buenas, seguras y eficaces, y cada una tiene su grupo diana", es decir, que los pacientes no pueden elegir, sino que ya están asignadas".
También reconoció la consejera que en el Consejo Interterritorial de Salud Castilla y León ha pedido que una vez que estén vacunados los seis grupos que se consideran prioritarios, se comience a administrar las dosis por edades.
Casado anunció, además, que solicitará a la Federación Española de Municipios y Provincias que los ayuntamientos ayuden a Sanidad a disponer de espacios amplios para cuando lleguen todas las vacunas.
A este respecto, la consejera ha dejado claro que se estudiarán todas las ofertas que se han recibido y ha dicho que se precisan instalaciones "seguras, donde se pueda hacer una organización perfecta y que permita acoger a muchas personas".
