El proceso selectivo para la categoría de celador turno libre del Servicio de Salud de Castilla y León sigue sin resolverse un año y cuatro meses después de la realización del examen, generando malestar entre los opositores afectados. Los aspirantes denuncian la falta de celeridad en la adjudicación de plazas y la priorización de otros procesos, como el de estabilización, lo que consideran un trato discriminatorio.
La convocatoria de este proceso se publicó en diciembre de 2022, pero el examen no se llevó a cabo hasta octubre de 2023, es decir, diez meses después. Pese a que ha transcurrido más de un año desde la realización de las pruebas, el proceso aún no ha concluido, dejando a los opositores en una situación de incertidumbre laboral y profesional.
Los afectados se muestran especialmente indignados porque, mientras este proceso sigue sin resolverse, la Consejería de Sanidad de Castilla y León ha avanzado en la resolución del proceso de estabilización para celadores, convocado después del turno libre. Esta situación ha generado un sentimiento de agravio comparativo entre los aspirantes, quienes consideran que se está favoreciendo a interinos, muchos de los cuales son miembros de sindicatos liberados.
Asimismo, critican la gestión de la bolsa de empleo de celadores, cuya última actualización se realizó en diciembre de 2021. No fue hasta 2024 cuando se completó la baremación de los aspirantes, lo que ha impedido el acceso a oportunidades laborales dentro del SACYL durante un periodo prolongado.
Los opositores exigen a la Consejería de Sanidad la inmediata finalización del proceso de adjudicación de destinos para celadores y una mejora en la gestión de las bolsas de empleo para evitar futuras dilaciones. Además, solicitan que se establezca un plan de organización del personal del SACYL que garantice la equidad y la eficiencia en la gestión de los procesos selectivos.
