Gala de excepción con música de excepción. El acto de entrega de los premios Castilla y León ha contado con la actuación de músicos regionales y locales en el que el zamorano Luis Pedraza se ha unido a la de Jorge Marazu y Nadia Álvarez para homenajear a los preciados en esta gala que reconoce la trayectoria y labor de los profesionales castellanos y leoneses más reconocidos.
El auditorio Miguel Delibes de Valladolid ha acogido la gala que premia a personalidades de la Comunidad en las áreas de Ciencias Sociales y Humanidades, Investigación Científica y Técnica e Innovación, Deporte, Artes, Letras, Tauromaquia y Valores Humanos y Sociales. Ha sido con sabor a recuerdo ante la ausencia del recién fallecido Fernando Sánchez Dragó.
La música tradicional de Pedraza, siempre fiel a su flauta y tamboril, ha abierto la gala en la que los seis premiados han descendido por las escaleras de la platea escoltados por bailarines regionales ante los aplausos de un público que ha seguido la animación iniciada por el zamorano.
Los galardonados Antonio Piedra Borregón como Premio de Ciencias Sociales y Humanidades, la Federación Camino Francés como Premio de los Valores Humanos y Sociales, mientras que el Premio de las Artes ha sido recogido por Luis Moro. Ha sido en un acto con acento zamorano de la mano de la investigadora María Victoria Mateos Manteca que ha recibido orgullosa su Premio de Investigación Científica y Técnica e Innovación tras ser ensalzada por el presidente de la Junta como un "ejemplo de éxito profesional y referencia internacional en su campo". Considerada la mejor investigadora del mundo en el campo del mieloma, estando entre los 100 mejores médicos de España, la investigadora de la Universidad de Salamanca ha recibido la ovación de los allí presentes.
Por su parte, Piedra Borregón ha sido calificado como "hombre polifacético" que aglutina en su ser las profesiones de profesor, filólogo, investigador, académico, gestor cultural, prestigioso articulista y, ante todo, poeta que ejerce cada día. Sus 30 años al frente de la Fundación Jorge Guillén convierten al premiado, a juicio de Fernández Mañueco, en uno de los mayores protectores del patrimonio cultural de Castilla y León.
En el caso del Premio de Valores Humanos y Sociales, ha sido la Federación Camino Francés -que aglutina la labor de 19 asociaciones- la encargada de representar esta categoría gracias a su capacidad para mantener los valores de "universalidad y tolerancia que el Camino Francés a Santiago ha reflejado durante más de mil años".
El grupo de galardonados lo completaban Carolina Rodríguez Ballesteros, Premio del Deporte y Pedro Gutiérrez Moya, 'El Niño de la Capea' que ha recibido el Premio de Tauromaquia. Rodríguez Ballesteros, considerada como "un ejemplo por su sacrificio y fuerza de voluntad para romper prejuicios sobre la edad de la mujer en el deporte" se erige a día de hoy como la única gimnasta del mundo que ha competido en unos Juegos Olímpicos a los 30 años y que se suma a su compromiso solidario y deportivo con la comunidad de sordos. Por su parte, Pedro Gutiérrez, encarado de inaugurar la categoría de Tauromaquia complementa su reconocimiento como figura legendaria del toreo a su labor profesional como ganadero.
Especialmente se ha sentido la ausencia del escrito premiado en el área de Letras y cuyo galardón ha recogido su hija, Ayanta Barilli. El presidente de la Comunidad ha elogiado la trayectoria del desaparecido Sánchez Dragó, poseedor de "una cultura enciclopédica y una original mirada sobre España y su historia".
