La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado el cierre de más de 300 camas hospitalarias y centros de salud por las tardes en Castilla y León debido a la falta de personal sanitario y la ausencia de planes de contingencia efectivos para el verano.
La situación va aumentando por la falta de médicos en Atención Primaria y la dificultad para contratar personal de Enfermería. CSIF advierte que esta falta de previsión podría llevar al colapso de las zonas turísticas más tensionadas y a un incremento en las listas de espera hospitalaria.
El plan de contingencia de verano en Castilla y León también incluye la reducción de la actividad quirúrgica y de consultas, y el desplazamiento del personal para cubrir permisos en otras áreas. El bajo número de contrataciones en el ámbito hospitalario y de Atención Primaria obliga a los profesionales a acumular consultas y cubrirse entre sí.
El cierre de centros de salud urbanos por las tardes en capitales como Burgos, Salamanca y Palencia aumentará la carga asistencial en los puntos de atención continuada y en los servicios de urgencias hospitalarias, incrementando la presión sobre un sistema sanitario.
