El vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, ha querido avisar que el hecho de apostar por el término de situación de "riesgo controlado" -en la que la comunidad entrará el próximo martes, 21 de septiembre- en lugar de "nueva normalidad" se trata de una cuestión terminológica para no llamar a confusión.
"No nos gusta mucho el término nueva normalidad porque no me parece que refleje exactamente la nueva situación porque pudiera hacer pensar que no hay riesgo. Hay un riesgo controlado por la inmunización y las medidas sanitarias, pero no es una situación de riesgo cero", ha precisado.
Igea ha señalado que el paso a esa situación de "riesgo controlado" implica que pasarán a desaparecer todas las restricciones y medidas que competen a la Junta, si bien sólo se mantendrán aquellas que están en manos del Estado central, esto es, el uso de la mascarilla, la distancia interpersonal y las guías de actuación tanto en residencias como centros de enseñanza.
