El comercio minorista de Castilla y León experimentó en el pasado mes de abril un retroceso en sus ventas del 0,6%, un descenso que contrasta con el repunte del 5% experimentado por el sector a nivel nacional según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Se trata del peor dato de ventas minoristas registrado en el conjunto del país. Únicamente el volumen de ventas descendió en Castilla y León así como en la ciudad autónoma de Melilla, mientras Baleares (12,4%), Comunidad de Madrid (10,4%) y Comunidad Valenciana (7,1%) experimentaron los mayores crecimientos.
Con estos datos el comercio minorista en Castilla y León acumula una subida en lo que va de año del 2,4%, si bien representa la menor evolución de todo el país. En España la media de ventas casi se triplican al alcanzar el 6,5%.
En cuanto al índice de ocupación del sector, en Castilla y León representa el 0,7% siendo el sexto dato más bajo por delante del Principado de Asturias, Ceuta, Región de Murcia, Cantabria y la Comunidad Foral de Navarra. Supone más de la mitad de índice de ocupación nacional que se sitúa en el 1,8%.
A nivel nacional, el dato del comercio minorista relativo al mes de abril supone cinco meses de tasas interanuales positivas desde el cambio de tendencia experimentado en diciembre del 2022.
Las ventas de productos de alimentación han subido un 0,9% a nivel interanual tras siete meses consecutivos de tasas negativas, mientras que las ventas del resto de productos han aumentado un 14,2% con respecto a abril del año pasado.
