"Jugar en casa nos da un plus. Cuando el equipo se activa, el público se anima y cuando el público se anima, el equipo se viene arriba. La verdad e que jugar aquí y no jugar solos es una gran ventaja. Si Leo para 13 balones en la segunda parte e Iván otros 4, son 17 paradas. Pero es que, además, hemos ajustado la presión impar y hemos subido las presiones y la defensa ha sido distinta. En cuanto se nos olvida la tristeza del mes de noviembre, el equipo muestra otra cara que es la que queremos tener y hemos vuelto a dejar a un equipo por debajo de veinte goles" señalaba García Valiente en rueda de prensa.
"Creo que necesitamos volver a ese juego rápido y alegre que nos lleva a lanzar muchas veces solos. Necesitamos para jugar colectivamente darle ritmo a la bola. El equipo tiene que volver a esa alegría que tenía hace años y eso se hace con ritmo de balón. Ocurre que como hacía semanas que no lo encontrábamos, aparecen dieciseis pérdidas de balón, pero es un peaje que hay que pagar" comentaba el entrenador.
En la segunda mitad, mejoró el equipo y García Valiente apuntó a la llegada de la felicidad: "En ataque hoy Diego y Alberto nos han dado un plus. Hoy todos han participado y han aportado lo que nos hace haber sido un equipo intenso y completo. Hemos conseguido superar la tristeza de la primera parte y hacer una buena segunda mitad".