El conjunto pistacho, sin apenas descanso tras el Memorial Manuel Camba, se desplaza a Aranda de Duero a jugar frente al Villa de Aranda de Asobal, que supondrá una nueva prueba para ver las mejoras del plantel zamorano, y conocer un poco más el nivel actual del equipo zamorano.
El Balonmano Zamora jugará el último partido de pretemporada antes de reducir la carga física que en esta primera parte de la temporada ha sido bastante fuerte y tiene a los jugadores de Eduardo García Valiente con bastante cansancio.
El Villa de Aranda es un conjunto de Asobal, que el pasado año consiguió mantener la categoría, y que esta temporada se ha reforzado muy bien y optará a mejores puestos en la clasificación, siendo una dura prueba para los zamoranos que, a excepción del amistoso en Tábara, todavía no conocen la victoria en la pretemporada.
Valiente espera que su equipo reduzca el número de pérdidas, y que el trabajo defensivo siga siendo uno de los puntos fuertes del equipo, dejando a su rival por debajo de los 30 goles, como ya hicieran el jueves con el Benfica.
