El MMT Seguros se contagió enseguida del ambiente de Artaleku, de las calles de Irún en fiesta, de las peñas ambiente de amarillo la ciudad; y salió en tromba, deslumbrando en ataque, casi sin fallo, con un Jortos inconmensurable aprovechando la amenaza de Molina y Reyes; y impenetrable en defensa donde el 6-0 se complementaba con un Leo Maciel pletórico.
Fue sólo un arranque, pero obligó a Palma del Río a vivir contracorriente el resto de la primera mitad, como si cada ataque pudiera ser el último y los cordobeses vivieran con la Espada de Damocles en la cabeza. Sin embargo, si Palma del Río está en esta fase como segundo clasificado es por algo y con mucho oficio y aprovechando el cansancio de los zamoranos fueron reduciendo la diferencia.
Al descanso se llegó con 10-10 y la sensación de que llegaba mejor el cuadro cordobés, como un equipo que fuerza la prórroga y tiene sobre la lona al que pegó primero, pero al MMT Seguros sólo le hacía falta recobrar algo de aire para volver a su mejor versión, esa que volvió a alacanzar al inicio del segundo tiempo cuando volvió a recobrar la renta y así poder mandar en el electrónico.
El partido se volvió mucho más tenso y feo pero los Guerreros de Viriato también supieron bajar al barro, anotar goles desde el pivote y en primera línea en un día en el que el trabajo de los extremos no se vio recompensado con goles y bajar el culo atrás para que, además del gran trabajo de Leo Maciel, los atacantes cordobeses tuvieran complicado encontrar el camino del gol.
Al ecuador del segundo tiempo se llegó con 17-14 a favor de los zamoranos que habían encontrado una mejor rotación en el segundo tiempo con la participación de todos sus hombres, incluidos Peli y Rodri, todavía muy mermados pero unidos a esta lucha para descargar de minutos a sus compañeros.
Leo Maciel levantó a la grada después de un par de paradas sensacionales que ayudaron a los suyos cuando no encontraban el camino del gol. El cansancio empezó a hacer mella en el cuadro de García Valiente y una pérdida permitió el 15-17 que apertaba el electrónico.
Diego Reyes intentó echarse el equipo a la espalda pero los errores ofensivos seguían pesando en el cuadro pistacho que veía como en otra contra el marcador se ajustaba hasta la ventaja mínima de los zamoranos. Molina intentaba jugársela y encontraba a Andrés en el pivote para poner de nuevo la ventaja de dos goles. Quedaban seis minutos y los zamoranos rozaban la victoria tras otra parada de Leo y el posterior gol de Marc Abalós.
A cinco minutos del final, Palma del Río agotó sus tiempos muertos para intentar insuflar las últimas instrucciones a los suyos pero la jugada ensayada acabó en falta en ataque. No encontraron gol los zamoranos en los dos siguientes ataques y desde el siete metros recortó la distancia de nuevo Palma del Río cuando restaban cuatro minutos.
Jortos volvió a disfrazarse de súper heroe para meter un gol imposible marca de la casa y poner la ventaja de tres goles de nuevo que obligó a Palma del Río a atacar con más corazón que cabeza y recibir el duro castigo de una nueva parada de Leo.
A la contra Marc Abalós puso el 17-21 y Leo Maciel volvió a cerrar la portería. El MMT Seguros pasaba a la final cuando aún restaban dos minutos para que Leo desquiciara más a los cordobeses y los pistacho celebraran la victoria.