El BM Zamora se prepara para dar inicio a una nueva campaña en la Primera Nacional, con la mirada puesta en una temporada que promete ser larga y exigente. Bajo la dirección de Félix Mojón, el equipo zamorano encara el reto de mantener una evolución constante a lo largo del año, con la idea de afianzar su estilo de juego y mejorar con cada jornada.
El Grupo B, donde compiten, es conocido por su competitividad y dureza, con rivales como Avilés y Salamanca que destacan por su físico y nivel de juego. Este panorama obliga al BM Zamora a mantenerse alerta, especialmente en los partidos fuera de casa, donde el desgaste será mayor. La temporada no estará exenta de altibajos, y el equipo deberá estar preparado para afrontar los momentos complicados que surjan en el camino.
Uno de los principales retos del entrenador es afianzar el sistema defensivo del equipo. Mojón se enfrenta al desafío de coordinar distintas filosofías y estilos de juego entre los jugadores, buscando un equilibrio que les permita sentirse cómodos y competir al máximo nivel. La plantilla, formada antes de su llegada, ha mostrado disposición, pero aún queda trabajo por delante para alcanzar el rendimiento óptimo.
El calendario arranca con un primer encuentro en casa, algo que beneficia al equipo al contar con el apoyo de su afición. No obstante, el equipo también deberá lidiar con algunas bajas importantes en el inicio de la temporada. Jortos no podrá estar presente en el primer partido, y la recuperación de Felipe sigue siendo lenta, lo que obliga a tomar precauciones para evitar riesgos.
