Saulo Hernández: "Ojalá podamos llegar a los minutos finales con opciones y que ellos noten la presión de su racha negativa"

El CB Zamora encara su próximo duelo liguero con una lección clara tras sus últimos enfrentamientos
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El CB Zamora encara su próximo duelo liguero con una lección clara tras sus últimos enfrentamientos: en esta nueva categoría, cada detalle cuenta. Así lo expresó su entrenador, Saulo Hernández, al analizar las recientes derrotas ante dos de los mejores equipos de la competición, Estudiantes y Obradoiro. "Para competir contra ellos tenemos que hacer un partido casi perfecto", reconoció el técnico, enfatizando la importancia de minimizar errores para mantenerse en la pelea.

La adaptación a una liga de mayor exigencia ha sido un proceso complejo para el equipo zamorano, que, según su entrenador, ha notado el salto de nivel con respecto a la temporada pasada. "El baloncesto es un deporte donde la suma de los detalles individuales marca la diferencia entre los buenos y los malos equipos", subrayó Hernández. Pequeños despistes en defensa, un rebote sin cerrar o una mala selección de tiro pueden ser la decisivos entre la victoria y la derrota en una competición tan ajustada.

A pesar de los tropiezos recientes, el CB Zamora mantiene su hoja de ruta intacta. Con 22 jornadas disputadas, el equipo se encuentra fuera de los puestos de descenso, lo que para su entrenador es un indicativo del buen trabajo realizado hasta ahora. "Nos hemos abstraído de lo que se dice fuera. Cuando ganamos tres seguidos, se hablaba de milagro; cuando perdimos cuatro, parecía que todo estaba perdido. Pero nosotros seguimos con los pies en el suelo", afirmó.

El próximo rival en el horizonte es el Castelló, un equipo que llega al choque con seis derrotas consecutivas a sus espaldas. Sin embargo, Hernández advierte sobre su peligro. "Han demostrado su potencial ganando a equipos como Tizona u Obradoiro", recordó. La clave para el CB Zamora será imponer su juego, asegurando el rebote defensivo y buscando correr en transición. "Nos sentimos cómodos cuando podemos defender, rebotear y correr", explicó el técnico, consciente de la importancia de controlar el ritmo del partido.

Además del planteamiento táctico, la solidez mental jugará un papel determinante en el choque. "Ojalá podamos llegar a los minutos finales con opciones y que ellos noten la presión de su racha negativa", comentó Hernández, confiando en que su equipo sabrá aprovechar las oportunidades que se presenten.

Con el tramo final de la temporada en el horizonte, el CB Zamora afronta cada encuentro con la necesidad de mostrar su mejor versión. La liga se aprieta y la seriedad durante los 40 minutos será esencial para seguir sumando en la lucha por la permanencia.

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