El Auditorio Tratado de Alcañices acogió este sábado la mesa redonda “Cruzando La Raya / Atravessando A Raia: Cultura de la frontera / Cultura da fronteira”, un evento que reunió a expertos de España y Portugal para reflexionar sobre la identidad compartida a ambos lados de la frontera. La iniciativa forma parte del programa homónimo impulsado por el Ayuntamiento de Alcañices, Turismo Centro de Portugal, Turismo Norte y la Junta de Castilla y León.
La elección de Alcañices como sede no fue casual: en esta villa se firmó en 1297 el Tratado de Zamora, que reconoció la independencia de Portugal y marcó el inicio de una vecindad compleja y fructífera. Desde entonces, la Raya ha sido escenario de intercambios culturales, alianzas y mestizajes que han dado lugar a una cultura fronteriza singular y creativa.
Durante la mesa redonda, los ponentes abordaron la evolución histórica, jurídica, territorial y cultural de la frontera, destacando la necesidad de verla no como una línea divisoria, sino como un espacio de oportunidad.
Entre los participantes estuvieron:
José Luis González Prada, doctor en Derecho y secretario general de la Fundación Rei Afonso Henriques, quien ofreció un recorrido histórico y jurídico de las relaciones hispano-lusas.
Carla Basilio, técnica superior de Turismo Centro de Portugal, que destacó el turismo como motor de cohesión cultural y territorial.
Carlos do Nascimento Ferreira, experto en geografía y planificación regional del Turismo Porto e Norte, quien analizó el desarrollo sostenible en regiones fronterizas.
Mario Bedera Bravo, profesor de la Universidad de Valladolid y exsecretario de Estado, que reflexionó sobre los retos legislativos y educativos en contextos transfronterizos.
La moderación corrió a cargo del periodista Javier Pérez Andrés, cuya experiencia en comunicación turística dinamizó el debate.
Entre los temas tratados se incluyeron la evolución de los marcos legales, la cooperación transfronteriza en turismo, educación y cultura, la promoción de la identidad fronteriza y los desafíos comunes ante la despoblación y el envejecimiento rural. Los expertos coincidieron en que la frontera puede ser un laboratorio de innovación social, donde la colaboración genere nuevas formas de desarrollo.
El público, formado por vecinos, autoridades locales, estudiantes y profesionales del sector, participó activamente en el coloquio final, abordando cuestiones sobre movilidad, educación bilingüe, patrimonio inmaterial y proyectos futuros.
La jornada concluyó con un mensaje optimista: cruzar la Raya es una actitud cultural. En tiempos de fragmentación, la frontera puede enseñar a convivir, compartir y construir juntos, consolidando a Alcañices como un símbolo de puente y esperanza entre España y Portugal.