Un día con cielos despejados ha sido testigo de la recuperación de la romería de Santa Cruz en Fermoselle. El año pasado los follacos tuvieron que conformarse con acercarse de manera prudente y cumpliendo con los aforos hasta la ermita, en cuyo interior les espera el Cristo del Pino.
Este año ha sido distinto. Ya sin restricciones, los romeros salieron esta mañana a la Plaza Mayor de la villa acompañados por tamborileros de Fermoselle para llegar caminando como marca la tradición hasta la ermita del Santo Cristo del Pino, conocida popularmente como Santa Cruz.
Tras dos años "sin pisar la ermita", los vecinos se reunieron en la celebración de la santa misa para después disfrutar de un día romero en la pradera, amenizado por tamboriles y dulzainas.