El Zamora CF se suma al juego inclusivo con los niños de la Escuela 100×100 Deporte
En una tarde soleada de mayo, el anexo del estadio Ruta de la Plata se convirtió en un espacio donde el fútbol volvió a demostrar su capacidad de unir, incluir y emocionar. Varios jugadores del Zamora CF dejaron a un lado la presión competitiva de una temporada que aún mantiene viva la esperanza del Play Off para sumarse, de forma cercana y comprometida, al entrenamiento de la Escuela 100×100 Deporte en Zamora.
Carlos Ramos, Dani Hernández y Fermín Sobrido fueron los protagonistas de una jornada muy especial para los casi 30 niños y niñas que forman parte de esta escuela de fútbol inclusivo, una iniciativa de la Fundación Eusebio Sacristán con el respaldo de la Fundación de Castilla y León, Caja Rural de Zamora, el Ayuntamiento de Zamora y la UD San Lorenzo.
Los jóvenes deportistas, algunos de ellos con discapacidad intelectual, trastorno por déficit de atención, retraso madurativo o procedentes de contextos desfavorecidos, vivieron una experiencia diferente junto a los futbolistas rojiblancos. No hubo presión por el resultado ni prisas por marcar gol: el foco estuvo en el compañerismo, el respeto, el disfrute del juego y la práctica deportiva como herramienta de desarrollo personal.
Durante la sesión, que incluyó ejercicios de pase, disparo, control y conducción, los jugadores del Zamora respondieron con paciencia y cercanía a las preguntas de los chicos, curiosos por conocer cómo vive su equipo este tramo decisivo de la temporada. Los entrenadores de la escuela aprovecharon la ocasión para agradecer personalmente a los futbolistas su implicación y su tiempo.
La jornada concluyó con las inevitables fotos de grupo, sonrisas amplias y un mensaje que quedó flotando en el ambiente: el deporte, cuando se juega con el corazón, tiene la capacidad de cambiar realidades. Una lección que tanto el Zamora CF como los niños de la Escuela 100×100 Deporte llevaron este lunes en sus botas y en su memoria.