La directiva dio un dato de la deuda de hace dos años, cuando ellos entraron, con el que no estaba de acuerdo el presidente de la anterior Gestora, algo que elevó el tono del debate hasta el punto de abandonar Macias el salón de actos.
Doscientos mil euros de diferencia tuvieron la culpa. Y es que la directiva dio un dato de la deuda a 1 de julio de 2013 que era de 469.500 euros, algo que enfadó a Isaac Macías que habló en nombre de su Junta Gestora y dijo que esos números eran falsos puesto que la deuda cuando salió del Zamora CF era de 263.000 euros.
Isaac Macías, dispuesto a pagar, junto con la actual directiva una auditoria interna del club, animó a Segismundo Ferrero a llevarlo a los tribunales si mentía y le recordó que le había entregado las cuentas hace unas semanas después de que el club se las volviera a requerir. El presidente entonces, comentó a la asamblea que su Junta Directiva había descartado una auditoria interna pero que si los socios votaban a favor de hacerle, se llevaría a cabo. Una votación que no tuvo lugar.
La actual directiva nombró entonces al ex-presidente José María Casas y un contrato con Progresión Dinámica que actualmente están pagando y expusieron que Casas no había dejado el club sin deuda, como ya hicieran en otra asamblea.
El tono de la discusión se fue elevando e Isaac Macías preguntó a la directiva si éstos habían recibido dos burofax de Puma exigiéndoles el pago total del merchandising, una pregunta que, por lo acalorado del debate, acabó quedándose en el aire, tras abandonar Macías el salón.
