Zamora se detiene cinco minutos por Sanabria: clamor unánime por el abandono de RENFE

En la Plaza Mayor de Zamora, el alcalde Paco Guarido se unía al gesto acompañado por varios miembros del equipo de Gobierno, visibilizando el apoyo del Ayuntamiento a una causa que ya trasciende partidos y siglas. “El Ayuntamiento está a favor de cualquier medida razonable que se pueda emprender para que las paradas del AVE vuelvan otra vez a Sanabria”, señalaba Guarido, añadiendo que “la vertebración del territorio consiste precisamente en eso: cuando solo hay AVE en nuestra provincia, su papel se vuelve fundamental”.

El regidor defendió que no se trata únicamente de una cuestión de frecuencias: “Es una medida justa. Incluso deberían incrementarse las paradas. Se suprimieron trenes convencionales y ahora el AVE es clave para el equilibrio territorial”. Guarido también quiso marcar distancias con otras polémicas recientes, como la falta de asientos o problemas de puntualidad, que considera “otro problema distinto”, aunque también graves. “Eso es responsabilidad del ministro Óscar Puente. Pero hoy hablamos de algo más estructural: que se repongan las paradas en zonas que las necesitan para no quedarse atrás”.

A escasos metros, en la Plaza de Viriato, el presidente de la Diputación, Javier Faúndez, se dirigía a los medios tras sumarse también al paro junto a diputados provinciales, representantes de la Diócesis y colectivos sociales. “Esta es una protesta contra una medida arbitraria, injusta y sin ningún tipo de planificación. Se castiga a una comarca entera porque alguien no quiere madrugar diez minutos”, denunciaba con contundencia.

Faúndez recordó que la protesta se enmarca en una campaña de presión más amplia, que tendrá continuidad: “Si RENFE no rectifica, seguiremos. Algunos actos surgirán de manera espontánea y otros serán organizados, como la manifestación prevista para septiembre, que ya estamos preparando”.

Sobre las vías legales, el presidente provincial reconoció que se sigue estudiando una posible impugnación judicial, pero lamentó que RENFE no haya entregado aún la resolución oficial que permitiría avanzar en ese camino. “Hemos pedido el documento a través de nuestros parlamentarios y estamos pendientes de ver si la línea puede considerarse de interés público, como se ha publicado”.

También respondió a las críticas de algunos comercios que aseguraban no haberse enterado del paro o no haber recibido el cartel anunciador. “Nosotros facilitamos carteles en la reunión que mantuvimos en la Diputación, con presencia de la Cámara de Comercio, la COE y otros colectivos. A partir de ahí, cada uno debe hacer su parte. Nosotros hemos contactado con ayuntamientos y otros organismos que colaboran”.

En colegios, negocios de barrio y pequeñas empresas, la protesta también tuvo eco. Niños y docentes se sumaron al paro en varios centros educativos de Zamora capital y Sanabria. En las calles, se sucedieron los gestos de apoyo y el silencio como símbolo de una lucha que ha calado en toda la provincia.

La mesa por el tren, impulsada en el seno del Ayuntamiento de Zamora y respaldada por distintas instituciones, colectivos sociales y ciudadanos, mantiene viva la reivindicación. El mensaje es claro: Zamora no se va a rendir.

En Sanabria concretamente en el Puente de Sanabria también se han concentrado vecinos y empresarios en favor de la lucha por esa parada que necesita la comarca para su desarrollo y continuidad.