Zamora cierra los accesos y parques anexos al río ante el episodio “puntual” y “normal” de crecida
Tranquilidad y normalidad más allá de la lógica llamada a la precaución. El área de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de Zamora se mantiene alerta controlando la evolución del caudal del Duero a su paso por la ciudad.
Una vez pasado el pico máximo, que se adelantó en previsiones y se ha dado en plena madrugada, con 850m3/segundo, se espera que la situación vaya mejorando con el paso de las horas. En este sentido, el concejal del área de seguridad ciudadana en el Ayuntamiento de Zamora, David Gago, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad, recordando que se trata de una situación “puntual” y “normal” enmarcada en esta época de habituales crecidas que se ha adelantado por el temprano deshielo procedente de la cabecera del río a su paso por Soria y Segovia.
Desde los servicios municipales se ha procedido a perimetrar los accesos a zonas fluviales y parques como es el caso de la avenida del Mengue, Nazareno de San Frontis, Pinilla y zona de Los Tres Árboles así como alguna parte del barrio de Olivares. Son todos ellos, zonas que forman parte del cauce natural del Duero y que, en palabras del propio Gago "cada vez que hay un poco de crecida se inundan".
La situación está siendo controlada por parte de Bomberos y Policía Municipal, si bien la información aportada desde la Confederación Hidrográfica del Duero apunta a la estabilidad, con el curso bajo ya dando los primeros síntomas de descenso como se aprecia ya al paso por Toro que mantiene el nivel de alerta amarillo.
Una situación fuera de cualquier excepcionalidad teniendo en cuenta que el pico anotado esta noche se sitúa tres veces por debajo del máximo histórico anotado en 2001, cuando el Duero alcanzó los 2.520 metros cúbicos por segundo. Adicionalmente, tanto el arroyo de Valorio como el Valderaduey bajan con un caudal de agua que, incluso, presenta datos levemente inferiores a lo habitual en estas fechas.