¡Ven más por Zamora, Pablo!
Salió de la casa de su padre en el casco antiguo. Caminó acompañado por su jefa de prensa y por otros compañeros del partido y se fundió en un cariñoso abrazo con Braulio Llamero. Después, fotos y selfies con zamoranos que le pidieron que viniera más por la ciudad para conocer los problemas de las ciudades de provincias.
"Que distinto es esto con Madrid, aquí os lleváis todos bien y os tratais con respeto" le decía Pablo Iglesias a los periodistas, de aquí y de fuera, que se agolpaban para poder tener las declaraciones del líder de Podemos. Cercano, sin el estrés de la campaña electoral y siempre cercano a la veintena de personas que le pidieron fotos antes de volver a su casa y pasar unos días con su familia.
Pablo Iglesias tuvo tiempo de charlar de política con los periodistas zamoranos que le preguntaban por cuestiones de índole nacional en un tono más cercano que el de una comparecencia de prensa. Iglesias hablaba de supuestas segundas elecciones, de haber vivido un debate más y de Juego de Tronos. No podía faltar Juego de Tronos en la nueva política nacional que, en ocasiones, parece calcar las historias que viven en Poniente.
Un jubilado se acercó a Iglesias y le pidió que volviera más por Zamora para que conociera los problemas de los zamoranos e Iglesias le respondía de forma afirmativa, prometiéndole que se acercaría algo más a menudo a la tierra de su padre. Fotos, selfies y un posado delante de la Catedral mientras charlaba con Braulio Llamero cerraron una jornada en la que después del jaleo el líder de Podemos se acercó al mirador del Troncoso y allí, además de ver el río Duero, aprovechó para grabar un vídeo.