El PP acusa a Armengol de tapar la corrupción del PSOE en el Senado
El Grupo Popular en el Senado ha dejado sin coartada a Francina Armengol en su comparecencia en la Comisión de Investigación del Senado. Los senadores populares acusan a la presidenta del Congreso de los Diputados de intentar tapar sus mentiras haciendo electoralismo a favor del PSOE en el Senado y le piden que asuma sus responsabilidades.
Los senadores del PP, Luis Santamaría y Fernando Martínez-Maíllo, han desmantelado la versión de Armengol sobre la corrupción relacionada con la compra de material sanitario durante la pandemia. Santamaría destacó que la corrupción dentro del PSOE comenzó con Koldo y Ábalos y ahora implica a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno. Además, cuestionó si el gobierno de Armengol había recibido alguna recomendación de Begoña Gómez en relación con contratos.
El senador Santamaría también planteó interrogantes sobre el margen de beneficio del 48% en la trama de corrupción con el material sanitario, mencionando que de los 3,7 millones de euros pagados por Baleares, 1,8 millones fueron desviados. Criticó el encuentro entre Armengol, Ábalos y Koldo García, poco después de que la Oficina Anticorrupción pusiera bajo sospecha los contratos con la empresa de la trama, Soluciones de Gestión.
Además, Santamaría destacó que las mascarillas compradas a la empresa de la trama no eran para uso civil, como afirmó Armengol, sino para trabajadores sanitarios, según la resolución del director del Servicio Balear de Salud, Juli Fuster, del 4 de mayo de 2020. Recordó que se contrató con Soluciones de Gestión a pesar de saber que no tenía experiencia en material sanitario y que uno de sus miembros aparecía en los papeles de Panamá.
Por su parte, Fernando Martínez-Maíllo acusó a Armengol de guardar mascarillas falsas y luego reclamar 2,6 millones de euros, perdonando más de un millón de euros a la trama corrupta. Señaló que el 23 de marzo de 2023, Manuel Palomino, ex director general del Ib-Salut, envió una carta confirmando que las mascarillas eran falsas, iniciando el expediente de reclamación el 6 de julio, coincidiendo con la toma de posesión de Marga Prohens, lo que demostró una "casualidad" sospechosa.
Maíllo también subrayó que, según un comunicado de Palomino, las mascarillas fueron distribuidas entre hospitales y retiradas tras comprobar que no cumplían con los estándares FFP2. Cuestionó si Armengol fue informado de que las mascarillas no filtraban adecuadamente, y criticó su alegato de desconocer la entrada de la UCO en la Consejería de Salud del Gobierno Balear, sugiriendo que miente o que trata de encubrir algo.