De la leyenda a la realidad: el cómic que transporta a la Zamora del pasado
La editorial Semuret presenta un viaje visual a la revuelta urbana de 1158, el Motín de la Trucha, con ilustraciones cautivadoras de Pifa Montgomery y textos evocativos de Eduardo Cabrero. Un cómic con una narrativa vibrante sobre uno de los episodios más significativos de la historia zamorana.
No existen crónicas objetivas y coetáneas que la describan. Los relatos escritos son de época muy posterior, aunque se conserva el testimonio arqueológico de la iglesia de Santa Maria La Nueva, lugar en el que se desarrolló uno de los principales actos de este suceso.
Se trata así de una forma interesante y atractiva para acercar estas historias a los más jóvenes “y sacarles de las pantallas”, según ha asegurado la concejala de Cultura, Mª Eugenia Cabezas. Por su parte, el Diputado de Cultura, Víctor López de la Parte, ha remarcado que este proyecto no solo busca entretener, sino también educar, llevando las historias del pasado a las generaciones actuales.
En esta serie de cómics, la capital es la protagonista, pero el objetivo es que las historias sigan abarcando y creciendo, no solo en la ciudad, sino extendiéndose por la provincia de Zamora. La próxima publicación tendrá como protagonista la romería de La Hiniesta.
La presentación para el público zamorano tendrá lugar en el salón de plenos de la Diputación de Zamora a las 19:30 horas, una oportunidad para sumergirse en las páginas de este cómic que promete ser una ventana al pasado.
Por su parte, Eduardo Cabrero, autor del texto, destaca la fusión entre historia y leyenda como el corazón de este proyecto, que no solo ofrece una visión arquitectónica del Zamora del siglo XII, sino que también mantiene viva la mística de la leyenda que rodea al Motín de la Trucha. Una continuación del Cerco que “era necesaria para conocer la historia”, tal y como ha remarcado el ilustrador Pifa Montgomery.
Con un lenguaje adaptado a los nuevos tiempos, este cómic busca cautivar a lectores de todas las edades llevando consigo un pedazo de historia zamorana en cada viñeta.