La conservación de la capilla habría retrasado 21 meses las obras del Hospital Provincial

Un momento de la rueda de prensa convocada este mediodía para detallar las obras en el Hospital Provincial

El gerente de Atención Primaria y la arquitecta del proyecto recuerdan que el edificio no estaba catalogado y que no se presentaron alegaciones al proyecto en el plazo establecido.

El gerente de Atención Primaria y Especializada de Zamora, Francisco Montes, ha dado a conocer esta mañana en rueda de prensa los detalles de la segunda fase de construcción del Hospital Provincial que hoy han comenzado con el derribo de la capilla, cuya conservación habría paralizado al menos 21 meses las obras en el complejo hospitalario, además de los costes derivados de resolver el actual contrato e idemnizar a la empresa.

Así, Montes ha desgranado las consencuencias de haber atendido las demandas vecinales y ciudadanas para preservar el inmueble, con un retraso de al menos 21 meses en las obras que se efectúan en el complejo hospitalario.

De este tiempo, 3 meses se emplearían para resolver el contrato con la empresa que actualmente ejecuta las obras; 6 meses para sacar a licitación de nuevo el contrato; 4 meses para su redacción, 6 meses para licitarlo y 2 meses más para obtener las licencias, por lo que ha explicado que "no es posible redactar de nuevo el proyecto en los términos en los que ha sido contratada la obra, ya que supondría una modificación sustancial y habría que resolver por tanto el contrato e indemnizar a la empresa con los costes derivados".

El gerente de Atención Primaria y Especializada ha añadido que conservar la capilla "supondría modificar el nuevo edificio que ocupará el lugar, así como los accesos y las zonas asistenciales". Montes ha aclarado, además, que "no es cierto que en su lugar se construyan 15 plazas de aparcamiento, como se ha dicho, sino que el 10-15% estará destinado a zonas construidas, que afectan a consultas, pasillos o acceso a la cocina de línea fría, entre otras".

Francisco Montes ha afirmado asimismo que "la prioridad de la Dirección del Hospital es la asistencia sanitaria", que se vería afectada por el retraso en la ejecución de las obras.

Otro de los aspectos destacados sobre la capilla es que "no era un bien no catalogado ni protegido" y que en su día, cuando el proyecto fue sometido a exposición pública, hubo un mes de alegaciones y "ningún particular ni organismo presentó ninguna objección".

En esta misma línea ha intervenido la arquitecta del proyecto, Cristina Tremiño, quien ha afirmado que la capilla no tiene "especial valor artístico", si bien ha matizado que se trata de una "opinión personal", a la vez que ha recordado que el Colegio de Arquitectos, que en los últimos meses se ha pronunciado a favor de conservar el inmueble, tampoco recogió la capilla en su catálogo de edificios singulares ni presentó alegaciones para defender su mantenimiento en el plazo establecido.