De Zamora a Andavías por sevillanas

Un momento de la parada en Palomares

Éxito del III Camino Flamenco, que finalizó con una actuación a beneficio de la Asociación contra el Cáncer.

Más de doscientos zamoranos participaron ayer en la tercera edición del Camino Flamenco Zamora-Andavías. Aunque el cielo en algunos momentos amenazaba lluvia y a pesar del fuerte viento en algunos tramos del camino, las circunstancias no desanimaron a los caminantes, que se concentraban a partir de las nueve en los aparcamientos de Valorio para organizar desde allí la salida de la comitiva, con vistosas carretas, alegría y colorido.

Tras atravesar Zamora, los peregrinos pusieron rumbo a Valderrey por la parte alta de Valorio para continuar por caminos rurales hasta Palomares, un bello paraje rodeado de árboles una vez pasada la localidad de La Hiniesta, donde tuvo lugar una larga parada para comer y la actuación del grupo flamenco Aire Fresco, que puso a bailar a todos los presentes por sevillanas y rumbas.

Finalizada la actuación, en la que también se arrancaron a cantar algunos de los presentes, la comitiva prosiguió en dirección a Andavías, en cuyo polideportivo tuvo lugar una segunda actuación a favor de la Asociación Española de la Lucha Contra el Cáncer, con la intervención del grupo D'Bureo, que se prolongó hasta altas horas de la madrugada poniendo punto final a una jornada de convivencia y fiesta que se consolida cada año y que surgió por iniciativa de un grupo de zamoranos rocieros que celebran así un particular camino.

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