El nuevo cuadrante laboral crea un conflicto importante entre Policía Municipal y Ayuntamiento de Zamora

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El enfrentamiento entre la Policía Municipal de Zamora y el equipo de gobierno del Ayuntamiento ha vuelto a ponerse sobre la mesa con la aprobación del nuevo cuadrante anual, una medida que ha sido impuesta sin consenso con los agentes, según denuncian los representantes sindicales. Los bomberos de Zamora se han unido a sus compañeros policías y el salón de plenos del Ayuntamiento ha sido un hervidero de pancartas en contra de un acuerdo sin sonsenso y sin la voz de los implicados.

Un cuadrante sin acuerdo

El conflicto surge tras la aprobación del nuevo cuadrante anual de la Policía Municipal, en el que los agentes aseguran que no han tenido voz ni voto. La decisión ha salido adelante gracias a los votos favorables de Izquierda Unida y PSOE, mientras que la oposición se ha abstenido en la última comisión. Los resultados en el pleno de este fin de febrero lleva a un problema añadido los bomberos se unen a la reivindicación de sus compañeros funcionarios.

Desde la Policía Municipal critican que cada año deben renegociar un cuadrante sin alcanzar nunca un acuerdo definitivo. "Llevamos años sin un cuadrante estable y ahora, además, nos imponen una nueva condición: una libre disposición para trabajar en cualquier evento sin compensación económica", denuncian.

El problema de la libre disposición

Los sindicatos alertan de que esta medida implica que los agentes deberán estar disponibles para trabajar en cualquier evento del Ayuntamiento, incluyendo fiestas, Semana Santa o actividades de fin de semana, sin compensación alguna. "Nos quieren meter el cuadrante por el artículo 33, sin negociación, sin derechos y sin conciliación laboral", explican.

Además, subrayan que esta imposición vulnera su derecho a la vida privada y la conciliación familiar: "Mi pareja trabaja en el Ayuntamiento y las de otros compañeros son funcionarias también y saben exactamente cuáles son sus días libres. Nosotros no podemos decir lo mismo", critica un representante sindical. SPPM: es el Sindicato profesional de Policías Municipales que junto con UGT tienen claro que su postura es más que razonable.

La postura del Ayuntamiento y la falta de diálogo

Desde la Policía acusan a Izquierda Unida y PSOE de ignorar sus derechos laborales. "Izquierda Unida nunca nos ha visto con buenos ojos, nos llaman ‘fuerzas represoras’ y no nos pueden ni ver", aseguran. A su vez, sostienen que el concejal de policía, David Gago, se comprometió a apoyar sus reivindicaciones a finales de diciembre, pero ha terminado aprobando el cuadrante con la nueva cláusula.

El malestar entre los agentes es evidente y el colectivo policial ya está organizando acciones para visibilizar su situación como así ha sido en el Pleno del Ayuntamiento.

Reivindicaciones del cuerpo policial

Los agentes piden menos decretos y más derechos laborales, equiparándose a otros funcionarios municipales. "Cuando hubo el incendio de la Sierra de la Culebra, muchos compañeros vinieron a trabajar de forma voluntaria, en sus vacaciones, sin cobrar. Pero no pueden jugar así con nuestras vidas y nuestras familias", denuncian.

Ante la falta de negociación y la imposición del nuevo cuadrante, el malestar en el cuerpo policial sigue en aumento. "Queremos que se respete nuestro derecho a la conciliación y a unas condiciones laborales dignas. Si el Ayuntamiento sigue adelante con esta medida, la tensión irá en aumento", advierten.

Con el Pleno municipal y las discrepancias mostradas entre el colectivo de la Policía Municipal y el equipo de gobierno de la coalición IU-PSOE, los agentes esperan que sus reivindicaciones sean escuchadas y que la situación pueda reconducirse a través del diálogo y la negociación, evitando un conflicto mayor dentro del cuerpo policial.

El Pleno del Ayuntamiento de Zamora ha estado marcado por la presencia de numerosos agentes de la Policía Municipal, que han acudido a expresar su malestar por la aprobación del nuevo cuadrante laboral. La sesión ha reflejado un intenso debate entre los grupos políticos y la concejala de Personal, Laura Rivera, quien defendió la medida impulsada por el equipo de gobierno.

Postura de Zamora Sí: “Una imposición sin diálogo”

Desde el grupo municipal Zamora Sí, se ha criticado que el Ayuntamiento siga actuando con una actitud de “despotismo ilustrado”, tomando decisiones sin contar con los afectados. Según su portavoz, la Policía Municipal ha sido excluida de la negociación, a pesar de que llevan años solicitando participar en la mesa de negociación general.

Además, señalaron que el nuevo cuadrante modifica el artículo 17 del calendario laboral permitiendo que los agentes puedan ser activados en sus días de descanso sin compensación económica. Para Zamora Sí, esta medida atenta contra la conciliación laboral y los derechos de los agentes, por lo que votaron en contra e instaron a una reflexión.

Postura del Partido Popular: “Es un expediente desastroso”

El portavoz del Partido Popular coincidió en que el malestar de los agentes es evidente y propuso que el expediente fuera retirado y renegociado. El PP consideró que el expediente estaba mal gestionado, con falta de transparencia y sin consenso, lo que ha llevado a una fuerte confrontación con los trabajadores municipales.

Desde el grupo popular insistieron en la necesidad de un diálogo serio y responsable para solucionar el problema y garantizar que los agentes tengan un marco laboral justo.

Defensa del equipo de gobierno: “No se suprimen derechos”

Por su parte, la concejala de Personal, Laura Rivera, rechazó las críticas y aseguró que el Ayuntamiento no ha suprimido ningún derecho a los empleados públicos. Afirmó que la medida se ha basado en informes técnicos y en experiencias previas, subrayando que la Policía ha trabajado con un sistema de dos turnos durante los últimos dos años sin afectar a la calidad del servicio.

Rivera explicó que la modificación propuesta busca garantizar la presencia de agentes en eventos y festividades “en la medida de lo posible”, dependiendo de efectivos y necesidades. Sin embargo, recalcó que esto no implica una imposición, sino una recomendación dentro del marco de trabajo habitual de la Policía Municipal.

A pesar de las explicaciones del equipo de gobierno, el malestar entre los agentes sigue latente. La falta de consenso y la ausencia de un proceso de negociación transparente han generado un conflicto que podría agravarse en los próximos días si no se llega a un acuerdo satisfactorio para ambas partes. El Pleno evidenció la división política en torno a este tema y dejó en el aire la posibilidad de futuras protestas por parte de la Policía Municipal.