Ni el intenso calor del verano ha sido impedimento para que los zamoranos se volcaran con devoción en la celebración del Día de la Virgen del Carmen. En una jornada marcada por las altas temperaturas, la ciudad ha vivido con emoción y fervor una de sus fiestas más arraigadas.
Con una gran expectación, la Virgen del Carmen ha presidido una misa especial en la Iglesia del Carmen, de la ciudad, presidida por Juan Luis Martín. La ceremonia, solemne y muy concurrida, reunió a numerosos fieles que no quisieron perderse este encuentro con la patrona del mar y símbolo de protección espiritual.
Tras la eucaristía, la imagen de la Virgen del Carmen fue sacada en procesión por las calles del casco histórico de Zamora. El recorrido, acompañado por la Banda de Nacor y el respeto de vecinos y visitantes que, a pesar del calor, siguieron con devoción cada paso del cortejo.
Uno de los momentos más emotivos de la jornada se vivió durante el paso de la procesión frente a la Iglesia de San Ildefonso y allí la Virgen fue recibida con especial fervor por los congregados y por la Virgen del Amor Hermoso que también salió detrás en procesión, que realizaron una emotiva reverencia cargada de simbolismo y tradición.
