Un “desafío fotográfico” para conocer el patrimonio histórico de Toro

El colegio Nuestra Señora del Rocío, uno de los cuatro pertenecientes a la Fundación Educativa “Amor de Dios” en la provincia, acaba de celebrar una jornada de convivencia dentro del proyecto educativo del centro, que este año lleva por título “Mirarme y mirar al mundo como Dios nos mira”. Así, los alumnos de Primaria se han desplazado a la vecina ciudad de Toro para descubrir una de las joyas de su patrimonio, la Colegiata, a través de un “desafío fotográfico” y compartir el tiempo del recreo con los compañeros del colegio Amor de Dios toresano, donde se han sumado a la conmemoración del centenario de sor Rocío, destacada hermana de la congregación que consagró su corta vida a la enseñanza. Por su parte, los estudiantes de Secundaria han desarrollado ese mismo objetivo de “mirarse a sí mismos” a través de una intensa jornada, en la que han desarrollado diferentes dinámicas y juegos colectivos, con la visita, además, de Cáritas Diocesana, quien les ha trasladado a través de sus miembros la destacada labor de la organización en la provincia.

“Los alumnos han recorrido diversos espacios de la Colegiata de Toro para fotografiar con sus tabletas los elementos que les pedía el juego”, explican los profesores de Nuestra Señora del Rocío. La actividad, que ha contado con la participación de cerca de 120 escolares, se completó con una visita al centro Amor de Dios de Toro, el primero de los fundados por el padre Jerónimo Usera, hace 150 años. Y en efecto, los alumnos de la capital junto con los compañeros de Toro pudieron recorrer la exposición que el centro toresano dedica por tal efeméride al padre Usera, donde se recoge una referencia a sor Rocío, ahora que se cumplen cien años de su nacimiento. La religiosa, miembro de la congregación desde edad muy temprana, dedicó buena parte de su vida a la enseñanza, antes de fallecer a corta edad, con tan solo 33 años.

Por su parte, los estudiantes de Secundaria del centro Nuestra Señora del Rocío dedicaron la jornada de convivencia dentro del objetivo “Mirarme y mirar a los demás como Dios nos mira” a compartir diferentes actividades educativas y recreativas en las instalaciones de Zamora. El acto más destacado se desarrolló en compañía de miembros de Cáritas Diocesana, que trasladaron a los jóvenes la extensa labor que la organización eclesiástica realiza en la provincia. De esta forma, los alumnos conocieron en profundidad las diferentes líneas de actuación de Cáritas, y mostraron especial atención a la ayuda que la organización presta a familias desestructuradas o con escasez de recursos, con el fin de que puedan salir adelante e integrarse en la sociedad zamorana. También conocieron los programas de apoyo a las personas con problemas de drogadicción, que suponen una actividad importante dentro de Cáritas. La jornada, tanto en Toro como en la capital, sirvió igualmente para estrechar lazos entre los alumnos y llevar a cabo los diferentes aspectos del proyecto educativo del centro Nuestra Señora del Rocío, ubicado en el barrio de San José Obrero de la capital.