La Guardia Civil recoge en la zona militar de Montelareina (Toro) un proyectil – tipo granada contracarro
El explosivo fue encontrado por un vecino de cuando paseaba por el campo. Tras dar aviso a la Guardia Civil fue retirado y destruido por personal especializado del Cuerpo ( SEDEX)
Durante la tarde del día 31 de marzo un vecino de la localidad puso en conocimiento de la Guardia Civil de Zamora, el hallazgo de unproyectil de artillería cuando paseaba por la antigua zona militar de Montelareina-Toro.
Tras la activación del protocolo de seguridad para este tipo de situaciones, la Guardia Civil, una vez trasladados hasta el lugar del hallazgo, procede a la localización, señalización y posterior retirada del
artefacto mediante personal especializado.
Éste artefacto explosivo resultó ser una granada contra-carro de 88.9 mm. para lanzagranadas (bazoka), marca Instalaza. Modelo MB-66 Combinado rompedora y de carga hueca.
Una vez recogido por el personal especializado, (componentes grupo SEDEX con base en la Comandancia de Valladolid), se procedió a su traslado a un punto próximo y seguro, para proceder a su destrucción inmediata debido al riesgo que supone su transporte y manipulación.
Para este tipo de servicios la Guardia Civil cuenta en la actualidad con personal altamente especializado tanto en la búsqueda, TEBYL (Técnico búsqueda y localización de explosivos); como en su
desactivación, SEDEX (Servio de desactivación de explosivos, asume a su vez las funciones sobre artefactos radiactivos, biológicos y químicos).
Desde la Guardia Civil se quiere comunicar, que es imprescindible y básico para evitar accidentes, recordar, que el transporte y manipulación de éste o cualquier otro tipo de artefactos, sean conocidos
o no, tiene un gran riesgo, por lo que se aconseja y recomienda NO tocarlos ni moverlos, y dar aviso inmediato a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para su recogida y posterior destrucción.Tener en cuenta que No nos podemos fiar del aspecto físico de estos artefactos que a pesar de parecer deteriorados, obsoletos e inofensivos, pudieran ser que estuvieran aun activos, pudiendo causar graves daños a las personas que los manipulen.
