Centenares de personas arropan a la familia de Leticia Rosino en el funeral de la joven asesinada en Castrogonzalo.
La iglesia de Tábara se ha quedado pequeña esta tarde para alojar a los centenares de personas que han acudido a dar su último adiós a Leticia Riesco Andrés, la joven de 32 años asesinada el pasado jueves en Castrogonzalo. Con las banderas del Ayuntamiento de la localidad a media asta y las campanas doblando a duelo, Tábara era esta tarde la imagen del dolor de unos vecinos desolados que han querido arropar a una familia rota.
También esta mañana el pueblo se echaba a la calle en una concentración en memoria de Leticia, una joven muy querida y conocida en Tábara, donde participaba en numerosas actividades culturales para intentar dinamizar la vida de la localidad. En la concentración se guardaron cinco minutos de silencio rubricados por una prolongada ovación. Previamente, tanto la familia de Lety (como la llamaban sus amigos) y de su novio, David, ha agradecido las innumerables muestras de cariño y apoyo recibidas en estos momentos. También el alcalde de la localidad agradecía los miles de mensajes llegados desde toda España y el cariño hacia la familia en un acto "que nunca nos hubiera gustado celebrar".
El funeral por Leticia Riesco daba comienzo a las cinco de la tarde. Apenas unas horas antes su presunto asesino ingresaba en el Centro de Menores Zambrana de Valladolid.