Centenares de zamoranos rinden honores a la Virgen durante el tradicional Quinario.
Centenares de zamoranos han abarrotado la iglesia de San Juan durante el Quinario en honor a la Virgen de la Soledad que organiza la Cofradía de Jesús Nazareno. Los cultos finalizaron ayer con una misa presidida por el Obispo de la Diócesis a cuyo término se formaron largas filas para pasar ante la Virgen y besar sus cintas. La ceremonia contó con la intervención del barítono Luis Santana y el coro de Jesús Nazareno.
Un año más el barítono Luis Santana interpretó con emoción el Ave María de Caccini para honrar a la Virgen de la Soledad, acompañada por centenares de zamoranos que quisieron mostrar su cariño a una de las devociones principales de la ciudad en uno de los cultos más multitudinarios de cuantos se organizan en Zamora.
Finalizada la misa de ayer, en la iglesia se formaron largas colas de fieles para pasar ante la Virgen, instalada en el altar mayor y ataviada con el hábito de viuda que luce en la tarde del Sábado Santo y en su exposición al culto todo el año en el templo sede de la cofradía.
Como es costumbre una vez que concluye el Quinario, la cofradía de Jesús Nazareno ha celebrado esta mañana en la iglesia de San Juan una misa en recuerdo de sus hermanos y hermanas fallecidos.