Emotiva Procesión de las Tinieblas en Benavente a pesar de las amenazas de lluvia
En una tarde marcada por la incertidumbre del clima, los fieles de Benavente se unieron en una muestra conmovedora de fe durante la Procesión de las Tinieblas del Martes Santo. A pesar de las precipitaciones que amenazaron con interrumpir la tradicional procesión, los cielos se aquietaron lo suficiente para permitir que los devotos recorrieran las calles con solemnidad y devoción.
El punto de partida fue la Ermita de la Soledad, donde se congregaron los miembros de la Real Cofradía del Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo y Cofradía de la Santa Vera Cruz, organizadores de este emotivo evento. Antes de que la procesión comenzara su recorrido, los presentes participaron en un acto religioso presidido por el capellán de la cofradía, en un gesto que reflejaba la importancia espiritual de la ocasión.
La procesión, encabezada por hermanos de la cofradía portando carracas, avanzó solemnemente por las calles de Benavente. A la cabeza, las imágenes sagradas de la Verónica, el Paso de Jesús con la Cruz a Cuestas, el Cristo Yacente, la Virgen de la Soledad y la Virgen de las Angustias, escoltadas por autoridades eclesiásticas y civiles, así como por la Mayordoma Mayor de las Damas de la Luz y de la Soledad.
Uno de los momentos más conmovedores tuvo lugar en la Plaza Mayor, donde la Virgen de la Soledad realizó tres venias ante la imagen de Jesús en la Cruz, mientras la Banda de Música Maestro Lupi interpretaba por primera vez en Benavente la Marcha Lenta "In Memoriam Luciano Huerga", una composición emotiva del director José López Cid.