La Hermandad de Penitencia registra dos nuevas altas e incorpora la figura de hermano emérito a los estatutos.
Agustín Lorenzo, el creador de la figura del bombardino de la Hermandad de Penitencia, ha asistido por vez primera en cincuenta años a la asamblea de la cofradía para despedirse como cofrade y pasar a la lista de hermanos eméritos. Su intervención ha constituido el momento más emotivo de una asamblea de trámite en la que se ha informado de dos nuevas altas.
Agustín Lorenzo ha recordado cómo vio en la televisión en el año 1968 la procesión en blanco y negro y cómo inmediatamente pensó que el sonido del bombardino le encajaría perfectamente, como así se ha demostrado a lo largo de medio siglo en el que el instrumento ha prestado sonido y personalidad propia a la hermandad de la noche del Miércoles Santo.
El músico leonés se desplazó a Zamora y tocó ante Marcelino Pertejo, Ricardo "Pintas" y Dionisio Alba -la gran tríada de la Semana Santa en el siglo XX-, quienes aprobaron su propuesta incorporando al bombardino a la procesión. Desde entonces Agustín Lorenzo no ha faltado ningún año (ni siquiera el que enterró en ese mismo día a su padre) y ha manifestado en la asamblea que se siente como un zamorano más. Aunque hace años cedió el testigo a Eduardo Vidal, Agustín Lorenzo continúa fuertemente vinculado a la hermandad, que ha instituido el premio "Bombardino de las Capas Pardas", otorgado este año a la Banda Villa de Olmedo, en la que desarrolló su vocación y formación musical.
Precisamente la figura de hermano emérito se incorporará a los estatutos de la hermandad, ya que hasta este momento solo figura en el reglamento de régimen interno, según explicaba el presidente, Antonio Martín Alén.
En cuanto a las altas, la Hermandad de Penitencia recibe este año a dos nuevos cofrades, manteniendo el número de 150 hermanos, ingresando altas por bajas de una larga lista de espera.
