De trabajar para Panasonic en Asia a camperizar en el alfoz de Zamora
Hablar de Semura Camper supone hablar de Inés, una ingeniera zamorana, que tras pasar ocho años en Shanghái y Kuala Lumpur, ha aterrizado en su ciudad natal para implementar una idea de negocio que busca revolucionar el mundo de la camperización a nivel nacional
Desde cualquier rincón de Castilla y León hasta Barcelona y Portugal, son cada vez más los clientes que han pasado por el polígono de Coreses para confiar su diseño, arreglo y/u homologación a esta experta que pasó ocho años trabajando para una de las grandes marcas de la automoción
Decía Mae West que solo se vive una vez, pero si lo haces bien, una vez es suficiente. Una premisa que cobra más sentido si cabe en un mundo que parece no deshacer nunca las maletas, especialmente tras la experiencia de una pandemia que nos ha hecho apreciar la fugacidad de la vida.
Y fue precisamente entonces, cuando el confinamiento dio paso a una nueva normalidad, el momento en el que las 'casas rodantes' dejaron de ser una pasión de pocos para convertirse en una alternativa de viaje cada vez más extendida y apreciada. Una forma de vida que se explota en Zamora y que esconde una historia de búsqueda por Asia.
Hablar de Semura Camper supone hablar de Inés, una ingeniera zamorana, que tras pasar ocho años en Shanghái y Kuala Lumpur, ha aterrizado en su ciudad natal para implementar una idea de negocio que busca revolucionar el mundo de la camperización a nivel nacional. Desde cualquier rincón de Castilla y León hasta Barcelona y Portugal, son cada vez más los clientes que han pasado por el polígono de Coreses para confiar su diseño, arreglo y/u homologación a esta experta de la automoción que durante su estancia en el mayor y más poblado continente trabajó para Panasonic.
Una empresa que nace así de una pasión por los viajes y el deseo de ofrecer una alternativa cómoda y flexible para aquellos que disfrutan de la libertad que proporciona viajar en autocaravana. Y lo hace paralelo a una demanda cada vez más creciente, no sólo para buscar alternativas vacacionales y de aventura, sino también de hospedaje que le han llevado a adaptar furgonetas a las necesidades de jóvenes trabajadores. Ha sido el caso de un forestal que "únicamente requería de un colchón y una buena nevera como demandas básicas" o de otro joven dispuesto a vivir en una mini casa rodante durante su breve periplo laboral en Tenerife.
Cada vehículo se personaliza según las necesidades y preferencias del cliente. Desde la inclusión de una pantalla para proyectar películas hasta la instalación de una cama y un frigorífico para un trabajador forestal, las opciones son prácticamente ilimitadas. Unas peticiones que vienen acompañadas de una charla de asesoramiento en la que Inés sopesa las necesidades principales para acomodarlas a la realidad y al presupuesto: "Lo primero que hacemos cuando viene alguien aquí es hablar unos minutitos Es necesario saber qué tipo de viajes van a hacer, cuánto tiempo, cuántos son en la familia... Con eso ya sacamos un patrón".
Unas necesidades que le han valido, por ejemplo, para patentar una estructura de camas individuales desmontables que, mediante un sistema de rastreles, le permiten adaptarse a las necesidades de familias con adolescentes: "Hemos detectado que en esas edades ya hay veces que viene el niño de 13 años y otras veces no, se van los padres solos". Una alternativa para aprovechar al máximo cada centímetro de espacio de estas furgonetas que pueden extenderse desde una Kangoo a las Fiat Ducato o las Mercedes Vito.
Inés le da forma a los planos, mientras su equipo completa la parte de la electricidad e instalaciones (Benja) y muebles (Mariano). Entre sierra, taladros y destornilladores, la mini casa de los sueños de muchos nace en esta nave que sustituye a su primera incursión en Palacios del Pan.
Mini casas en las que la autonomía está garantizada ya que una de las premisas pasa siempre por la instalación de grandes placas solares que ocupan prácticamente el techo de la furgoneta.
Aunque su foco es la camperización y alquiler furgonetas, también dan servicio de reparación y reforma a las autocaravanas, para adaptarlas a las nuevas necesidades de sus moradores o reparar aquellos desperfectos inevitables con el paso del tiempo. También se atreven con camiones, a los que colocan, por ejemplo, aire acondicionado en un transporte que también sirve de vivienda para las largas horas de viaje en carretera.
Viajar en camper es una manera de recorrer el mundo que toma impulso desde el corazón industrial del alfoz y que desprende pasión y aventura cada poro de la piel de este equipo impulsado por una emprendedora y aventurera nata.