El cuento sobre la Semana Santa de Zamora que da el salto a Inglaterra e Italia

Pinceladas de acuarela, documentación y, sobre todo, decenas de guiños personales han dado forma al primer cuento que realiza un recorrido íntegro por la Semana Santa de Zamora. Un proyecto nacido al albor de una demanda sin respuesta y que llevó a su autora, Sandra Alonso, a poner de nuevo en marcha toda una maquinaria sobre la que ya tiene sobrada experiencia pero que le ha supuesto una de sus mayores satisfacciones a nivel personal.

El proyecto ha tenido una repercusión inmediata dentro y fuera de la provincia llegando a puntos de Inglaterra e Italia, pero también a otros como Barcelona, Albacete, Oviedo y, sobre todo, Madrid y Sevilla. A ello se suman los buenos números que se traducen en cerca de 1.300 ejemplares vendidos en apenas mes y medio desde que el título “Una misión en Semana Santa” llegó a las estanterías. Todo a la espera del tirón que supone la llegada de la población flotante y visitantes: “Confiamos en que lo más gordo está por venir”.

Una historia protagonizada por el pequeño Manuel que debe resolver el misterio planteado por su abuelo relacionado con un medallón y que sirve de excusa para iniciar una aventura de once días desde el Jueves de Pasión al Domingo de Resurrección. La Semana Santa de Zamora se abre ante los ojos de Manuel y de los lectores más menudos para poner de manifiesto el inmenso patrimonio cultural, social y artístico.

Este cuento representa la vigésimo primera incursión editorial de manos de esta graduada en Educación Infantil y mención de Educación Especial que lleva ocho años inmersa en el mundo de la literatura infantil desde que viera la luz su primer título.

A través de 44 páginas y otras tantas ilustraciones, la propietaria de la librería especializada ‘Mis cuentos infantiles’ ha dado vida a una verdadera guía para principiantes y cuna de los inicios de un fervor que casi se mama desde la cuna. “Hay niños que con apenas dos años ya reconocen a las vírgenes,  y se saben nombres de cofradías e instrumentos”. Una oportunidad para fomentar esta Pasión pero también para descubrirla al público más ajeno.

De la mano de la ilustradora y licenciada en Biología María Galán, el cuento se convierte en una fuente descubrimiento y uno de los trabajos más personales en el que los guiños autobiográficos de ambas zamoranas se cuentan por decenas. Desde el nombre y apariencia física del personaje principal y del abuelo inspirados en el hermano y abuelo de la propia María, pasando por sus localizaciones predilectas para ver procesiones como la de Nuestra Madre o las propias mariquitas que saltan del logotipo de la librería a todas las publicaciones con el sello de Sandra, el cuento supone un salto a la infancia de ambas.

La propia Sandra aparece ilustrada en la procesión de La Soledad en un cuento salpicado por la partitura parcial de la Marcha Fúnebre de Thalberg y el que no pueden faltar algunos de los productos más típicos de la zona, desde las almendras garrapiñadas al dos y pingada.

Y es que la Semana Santa levanta pasiones que convierten cualquier producto inspirado en un objeto de coleccionista. Y es que son muchos los que, pese a rebasar la edad recomendada, no han dudado en hacerse con el libro para incorporarlo a su colección particular. “Incluso se regala de adultos a adultos”.

Este cuento infantil puede adquirirse de manera física en Mis Cuentos Infantiles, pero también en Ler, Mil Hojas, Drial y Laumar en Morales del Vino.