Javi y Jenny mis hermanos, pequeños disidentes humanitarios que tienen el "corazón partío" en entre Ucrania y los Valles

Mis hermanos de Acción Norte, Javi y Jeny han compartido con la indomable vieja Mery ( furgoneta Volkswagen Transporter) otra aventura de solidaridad y de apoyo humanitario ante una bacanal de miedo, bombas y guerra. Desde los Valles y hasta la mismísima Ucrania, con más de 3.200 kilómetros encima, esta pareja que había vendido su pick up para y por si acaso no llegaba el dinero con el beneficio alcanzado al vender su coche, y ponerlo para cualquier imprevisto. Ellos decidieron ponerse en carretera para ayudar a que 35 refugiados pudieran encontrar una nueva vida lejos de la bombas de Putin.

Con Javier Bodego me unen a parte de una disidencia y ser también del grupo de terroristas bomberos tal y como lo denominan en alguna grabación que fue presa del secuestro judicial, me une como decía, una amistad y un cariño especial. Él y su mujer tienen un terrorismo humanitario que ya quisieran sus jefes esos que presumen de parque y alardean de....mejor ni contarlo, puesto que todo se sabrá en su tiempo y esperemos como dice el refrán todo cerdo tenga su San Martín sin ofender a los animales que nada tiene que ver con la raza humana.

Nada mas que decir de quien al igual que Putin intenta socavar la libertad mediante coacciones amenazas y un largo etcétera que no merece ni mención, porque hablamos de dos personas íntegras con un nivel de solidaridad que no hemos visto en los 53 años que estamos en esta tierra.

Desdenes a parte con esta pareja me han vuelto a unir kilómetros de carretera, ganas de ayudar a los demás y sobre todo orgullo de pertenecer a una ONGD que actúa de una manera directa, y al corazón del problema, sabiendo que bypass hay que utilizar y sobre todo de forma efectiva y contundente. El capitán de la expedición besaba a hurtadillas a su mujer en pleno viaje, su amor fue testigo de una estela que dejaba su vieja Mery y que daba rienda suelta a que todos pudiéramos envidiar esa verdadera relación que tienen dos personas como estos terroristas "humanitarios míos".

Solidarios, sólidos, en sus convicciones y preparados para cualquier contingencia y buscando las soluciones en el momento e intentando prever como salir adelante del siguiente lapso de problema, ellos dos, son el tándem perfecto, ya que aunque en algún momento hubo agobio, la solución fue entre rápida e "ipsofacta" además de buena y de tomar nota para nuevas expediciones.

Antes que los voluntarios en este viaje como en todos los de la ONG, comían los refugiados, nosotros hicimos de sus camareros y servidores y ellos se extrañaban de la postura que tomamos para con ellos, a alguna de mis chichas por ejemplo tuve que explicarle que en este barco la tripulación y el capitán comerían y descansarían si había tiempo para ellos, nada más, que lo importante para nosotros eran ellas nuestras pasajeras.

Jeny la benjamina del grupo siempre tuvo un "gracias" amable, un... cariño no te preocupes en la punta de la lengua, y sobre todo un abrazo ante el quebranto y la rotura emocional tan de moda en esta particular "casa de la pradera" que supone que veas al prójimo como a ti mismo y empatices.

Es sencillo, es humano y sobre todo efectivo. El abrazo de Javi es "apretao" unas veces más y otras menos en función de la carga emocional que tengas, creo que sabe como te encuentras en todo momento y sus dos brazos de bombero rodean el fuego de tu alma de forma magistral, y calman heridas y dolores sin más que el roce humano,  pero hay que decir que el de Jeny siempre es el mas intenso del mundo y como no el mejor, ella es madre.

Verles sufrir por algo, desgarra el corazón porque no se merecen en ningún caso que esto ocurra, pero mi hermano pequeño Javi es el solucionador de problemas que querría cualquier Consorcio o cualquier negociado ya sea de la Diputación o de cualquier estamento. No sabe extorsionar todo lo hace a corazón abierto, puesto que sino sería Comandante en Jefe de cualquier entidad o estamento.

ONGD ACCIÓN NORTE es otro guardián de la Paz y con todo el apoyo a la negociación ha conseguido al menos sacar del país a 35 refugiados que desean volver a casa más que "Marco buscando a su madre y a su mono Amedio". No ha sido fácil pero volveremos esa es su máxima.

La casa de la Pradera inició su andadura el 9 de marzo  y el 19 quedó todo en vías de solucionarse, las últimas, las chicas de Paco y Mayya montaban en el tren camino de su destino final en Cataluña y allí están ya viviendo una vida diferente e intentando arrancar un futuro, Olga ya tiene trabajo y el otro grupo familiar dentro de ellas seis irán a Lloret de Mar al menos durante 6 meses para allí poder asentar su futuro.

Benditos embaucadores de vidas solidarias, Javi y Jeny ....no cambiéis nunca jamás, el mundo agradecerá vuestra gestión. Se os quiere por encima de todo y no contaremos más de momento ya que sabemos que la "Llorona" si no volverá a liarla, la Argusineja hará lo mismo y hasta los más duros de expedición no soportarán el mantener el aliento para no sollozar como críos que dicho sea de paso reconforta y relaja.