La Fundación Franz Weber pide que no se lleve a menores a los encierros y capeas de Fuentesaúco
La organización recuerda que Naciones Unidas recomienda prohibir la participación y asistencia infantil a espectáculos taurinos por su impacto en el desarrollo emocional
La Fundación Franz Weber ha reclamado este lunes que niñas, niños y adolescentes no asistan a los actos taurinos previstos en Fuentesaúco durante la primera semana de julio. La entidad denuncia que encierros, capeas y desencajonadas siguen siendo accesibles a menores de edad, contraviniendo las recomendaciones del Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
Durante casi una semana, del 2 al 7 de julio, los festejos taurinos del municipio zamorano permitirán que menores presencien “no solo el sufrimiento de los animales, también posibles cogidas y lesiones de los participantes”, advierte la organización. Franz Weber subraya que se trata de episodios de violencia explícita que, según sostienen, pueden resultar perjudiciales para su desarrollo moral y emocional.
La fundación recuerda que en 2018 el Comité de los Derechos del Niño instó a España a prohibir la participación y presencia de menores de 18 años en este tipo de espectáculos. En su informe, el organismo internacional señalaba textualmente: “Para prevenir los efectos nocivos para los niños del espectáculo de los toros, el Comité recomienda que el Estado parte prohíba la participación de niños menores de 18 años como toreros y como público en espectáculos de tauromaquia.”
En agosto de 2023, la misma institución reforzó esta posición en su Comentario General nº 26, al incluir en el apartado sobre el derecho a no sufrir ningún tipo de violencia que los niños deben ser protegidos de todas las formas de violencia física y psicológica, así como de la exposición a la violencia infligida a los animales.
Franz Weber critica que, pese a estas directrices internacionales, el Ayuntamiento respalde actividades taurinas específicamente diseñadas “para adoctrinar” a niños y niñas, fomentando su implicación como fórmula de relevo generacional del interés por la tauromaquia.
La entidad también ha recordado que UNICEF apoya la aplicación de estos vetos y anima a las “ciudades amigas de la infancia” a incorporar las objeciones de Naciones Unidas en su normativa y políticas públicas.