La EHE "no frena" en la provincia de Zamora y supera ya el millar de vacas muertas
Se esperaba un cambio con la llegada del frío, sin embargo, "no se está frenando", tampoco la muerte del mosquito que provoca la enfermedad, el culicoides, ha hecho que la cifra disminuya en la provincia de Zamora
La afección continúa saltando a los ciervos silvestres tal y como se notificó a principios de octubre. Hasta el momento, hay veinte animales fallecidos
Esta patología "está causando más estragos" de los que parecía y que se expande por la provincia hasta mantener unos datos de morbilidad y mortalidad "por encima de los que se habían dado inicialmente por el Ministerio"
La Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) no da tregua a la provincia de Zamora. Los animales siguen muriendo y la evolución "no está siendo como se esperaba", ha lamentado la delegada territorial de la Junta de Castilla y León, Leticia García. Hasta el momento, hay 464 explotaciones en estudio y ya son 9.384 las reses que presentan síntomas, 1.029 han fallecido a fecha de 20 de noviembre. Además, la afección continúa saltando a los ciervos silvestres tal y como se notificó a principios de octubre. Hasta el momento, hay veinte animales muertos.
Se esperaba un cambio con la llegada del frío, sin embargo, "no se está frenando", tampoco la muerte del mosquito que provoca la enfermedad, el culicoides, ha hecho que la cifra disminuya en la provincia de Zamora. De hecho, los síntomas "se están alargando más de lo previsto, ya que inicialmente parecía que iba a ser dos semanas, pero realmente están más tiempo enfermos y como se están alargando los síntomas siguen muriendo".
Esta patología "está causando más estragos" de los que parecía y que se expande por la provincia hasta mantener unos datos de morbilidad y mortalidad "por encima de los que se habían dado inicialmente por el Ministerio". La enfermedad hemorrágica epizoótica es una enfermedad vírica infecciosa no contagiosa transmitida por vectores que afecta a rumiantes domésticos y salvajes. En el ganado vacuno puede producir clínica moderada y autolimitante durante unas dos semanas. El ganado ovino es susceptible a la infección, pero poco a la enfermedad clínica, y el caprino es muy poco susceptible a la infección. Es una enfermedad que afecta a los ciervos, y puede afectar también a gamos y corzos.
Una de las medidas que se recomienda para el control de la enfermedad consiste en la lucha vectorial, mediante el empleo de insecticidas y repelentes en animales, medios de transporte e instalaciones, así como el uso de insecticidas y larvicidas para el control de las posibles zonas de cría. Para garantizar una desinsectación eficaz es necesario, entre otros aspectos, usar un insecticida que sea efectivo frente al vector en cuestión.