Los partidos PP y Vox han echado atrás la Proposición No de Ley, presentada por el grupo socialista en las Cortes y defendida por el procurador zamorano José Ignacio Martín Benito, que instaba a la Junta de Castilla y León a comenzar las obras de la variante de Moraleja del Vino.
El procurador del PSOE de Zamora, José Ignacio Martín Benito, ha explicado en la presentación de la PNL que, tras las obras de regularización del firme y sustitución de la señalización vertical entre Moraleja y Venialbo, una intervención que costó más de 1,7 millones de euros, “seguía y sigue pendiente el problema de la travesía, una carretera peligrosa, muy estrecha, prácticamente sin aceras, con el consiguiente riesgo para la seguridad de los vecinos del pueblo y demás transeúntes”.
“La carretera soporta más de 3.000 vehículos diarios en el tramo anterior a Moraleja del Vino y supera los 1.100 vehículos en el tramo Moraleja-Venialbo, de los que 9% son vehículos pesados que superan las 15 toneladas. Estos generan una contaminación acústica que supera los 85 decibelios permitidos por la ley”, ha apuntado el procurador zamorano, que añadía que “las vibraciones del paso de los coches han provocado daños a algunas viviendas y han afectado la estabilidad a las bodegas”.
Esta variante, ha explicado Martín Benito, se incluyó en el Plan de Carreteras 2008-2020 pero sufrió “el mismo destino que el resto de variantes de la provincia de Zamora incluidas en el Plan: el olvido”.
Y es que esta obra es “una de la docena de variantes de población de la provincia de Zamora, contempladas en el Plan autonómico de carreteras 2008-2020, que no se llevaron a cabo”, tal y como se confirmó, tras la respuesta a una pregunta de los procuradores zamoranos del PSOE en 2023, por “las circunstancias económicas acaecidas durante la duración del Plan”.