El Grand Prix regresa a las pantallas con una imagen renovada sin vaquilla
La parrilla televisiva de las noches de los veranos de la década de los 90 y 2000 no se entiende sin el Grand Prix. El concurso televisivo que reunía a miles de familias entorno al televisor para presenciar las divertidas pruebas que enfrentaban a habitantes de pequeños pueblos repartido por toda la geografía nacional.
Un formato presentado por Ramón García -y relevado ya en su última etapa por Bertín Osborne- que se mantuvo en TVE entre 1995 y 2005. En total 11 temporadas y más de 170 programas grabados en los que las pruebas como 'La patata caliente', la rampa, los troncos locos o los bolos hacían las delicias que pequeños y mayores. Un programa que, por fin, regresará a nuestras pantallas.
Y es que RTVE ha confirmado la vuelta de este mítico concurso del que podremos disfrutar desde este mismo verano. En total se grabarán 17 programas para volver a elegir al pueblo ganador tras 18 años de ausencia. Con él regresará, previsiblemente, su cara más reconocida como es Ramón García y cuyo contrato ya se está negociando, al tiempo que se recuperarán las pruebas de mayor renombre y que más divirtieron durante años entre piscinas, plataformas móviles y plazas de toros.
Sin embargo, la prueba central del concurso con la presencia de una vaquilla que, en esta vuelta, será sustituida por un aparato automatizado aún por concretar. El programa se adapta así a los nuevos tiempos con la vuelta de los retos físicos al más puro estilo de 'humor amarillo' pero también de conocimiento general siempre con ese particular toque divertido.