La Marina acoge una vez más la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, un evento esperado que abrió sus puertas en homenaje a Antonio Pariente, fundador de la feria y quien, hasta su fallecimiento este año, fue el alma de esta iniciativa cultural. En una rueda de prensa encabezada por el concejal David Gago y el vicepresidente de ALVACAL, Abel Vieito, ambos recordaron a Pariente como el impulsor incansable que convirtió esta feria en un referente en Castilla y León.
"Antonio siempre estaba ahí, organizando, moviendo y aportando ideas. Era la cabeza visible de esta feria y su ausencia es la razón por la cual este año se ha retrasado la edición", explicó Gago. La feria, que habitualmente se celebraba en septiembre, ha visto su inicio pospuesto hasta noviembre, entre otras cosas, en señal de respeto a quien tanto hizo por este evento y por el mundo de los libros antiguos en la región.
Para esta edición, la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión reúne a cinco libreros, cuatro de Castilla y León y uno procedente de Madrid, quienes ofrecerán hasta el 24 de noviembre una amplia selección de volúmenes únicos. Entre los tesoros expuestos se pueden encontrar ediciones descatalogadas, algunas de ellas centradas en la historia zamorana, como antiguos textos sobre el Monasterio de Moreruela y ediciones históricas de Zamora. Además, hay facsímiles de obras significativas y una variada oferta que incluye novela, literatura infantil y cómics, además de algunas revistas antiguas que reflejan la sociedad de épocas pasadas.
"Tenemos libros de todo tipo, desde grandes novelas hasta publicaciones menos convencionales. La gente joven nos sorprende cada vez más; buscan poesía y cómics, lo cual es muy gratificante", comentó Vieito. Asimismo, resaltó que la mayoría de los ejemplares son adquiridos a particulares, lo que permite encontrar auténticas joyas inesperadas.
La feria permanecerá abierta en horario de 11.00 horas a 14.00 horas y de 17.00 horas a 21.00 horas, y desde ALVACAL y el Ayuntamiento de Zamora se anima a todos los zamoranos a pasearse por los distintos stands y explorar el vasto catálogo de libros disponibles, una ocasión única para redescubrir el valor de la literatura antigua en una ciudad que, como afirmaron los organizadores, “siempre responde con entusiasmo a eventos culturales como este”.
