La Junta General Ordinaria de Accionistas de Unicaja Banco, celebrada este miércoles de forma telemática, ha aprobado las cuentas anuales y ha abordado las medidas adoptadas ante la pandemia del coronavirus.
Unicaja Banco afronta la actual situación desde una posición de solidez y fortaleza financiera, que permitirá apoyar a sus clientes en el contexto actual de dificultad, dar respuesta a los cambios de la sociedad que se avecinan y vislumbrar el futuro como proyecto empresarial sólido.
Obtiene el apoyo mayoritario de los accionistas, que han refrendado la gestión en un ejercicio marcado, entre otros aspectos, por la aprobación del Plan Estratégico 2020-2022, que será objeto de revisión ante la nueva situación económica, respetando los valores de la entidad.
El presidente de la entidad, Manuel Azuaga, ha señalado que "en Unicaja Banco somos conscientes del cambio social profundo que se acerca, y creemos que podemos abordar el papel que esta sociedad emergente nos demanda". En este sentido, se refirió a la existencia de una convicción generalizada de que "nos encontraremos con una sociedad bien distinta" cuando la pandemia cese y quede atrás el confinamiento: más avanzada tecnológicamente, más solidaria, en la que la globalización va a ser objeto de revisión, y en la que la demanda de mutualización entre los países de una misma área va a ser creciente. "Una sociedad en la que los sectores público y privado están llamados a intensificar la colaboración entre ambos para atender eficazmente las demandas sociales", apuntó.
Asimismo, ha explicado que la entidad ha priorizado garantizar el servicio y la protección a clientes y empleados, e impulsado medidas, para ayudar a los colectivos vulnerables y adaptarse a las necesidades de los clientes, como la concesión de liquidez y financiación con aval público a empresas y autónomos, moratorias, o el adelanto del pago de pensiones y de prestaciones por desempleo.
