Deliveroo dejará de operar en España a partir del próximo 29 de noviembre, por lo que el servicio de reparto a domicilio de comida procedente de todo tipo de restaurantes y servicios de restauración se quedará sin un servicio menos a consecuencia de la entrada en vigor de la conocida como 'ley rider'.
Esta ley, aprobada el pasado mes de julio, obliga a las empresas a contratar como asalariados a sus repartidores para acabar con los falsos contratos de autónomos. La "dura decisión", tal y como informa la compañía en un comunicado de prensa ha sido tomada de acuerdo con los empleados para acordar paquetes compensatorios o remuneraciones justas.
"La empresa se enorgullece de haber contado con algunos de los mejores restaurantes de España como socios y de haber colaborado con miles de riders que han trabajado duro para llevar a los españoles millones de deliciosas comidas desde 2015, incluso de haber sido una tabla de salvación para muchos de ellos durante la pandemia", ha comunicado la empresa.
Una ley que fue denunciada por la la Asociación de Plataformas de Servicios bajo demanda, que advirtió que la normativa pone el riesgo el futuro de miles de puestos de trabajo de un servicio que aporta más de 700 millones de euros al PIB español.
